Ántrax

NORA

Cuando entre por primera vez a un club tenia 14 años, recuerdo perfectamente como me impacto el ruido y la diversión. Todas las personas parecían felices y radiantes, bailando al ritmo de la canción que sonaba en ese momento. 

Fue entonces que perdida entre aquella marea de personas pude ver el cuerpo de quien hasta entonces solo había visto los ojos, con las luces estrambóticas no pude identificar su azul cielo aquel que yo sabia perfectamente pero lo que si pude ver fue el brillo de la maldad y la rabia, como si yo le hubiera hecho algo. Fue la primera vez y tan solo un segundo pero no fue la ultima vez.

Ahora con 20 años conocía muy bien el funcionamiento de un pub, lugar de encuentro de cientos de personas por diferente razones, la mayoría para crear una burbuja con su realidad. Lo que antes pensaba que eran personas divirtiéndose y disfrutando de la vida ahora se que no son más que cuerpos queriendo aparentar que tienen un vida perfecta con la cual están muy contentos todo esto mientras se olvidan de sus responsabilidades. 

Responsabilidades es una palabra muy común en mi vida. Ser la dueña de un gran club en Nueva York no es fácil y mas cuando mis clientes son gente tan exclusiva con unas manías muy extrañas. Siempre he sabido que las personas con dinero sin raras, tienen gustos raros, visten de forma rara y comen comida rara. O puede ser que al yo venir de la calle y escalar tan alto en tan poco tiempo no me ha dado el tiempo de acostumbrarme.

Desde hace dos años vivo y respiro por el club tentaciones y no es solo que llevo trabajando aquí mas tiempo del que soy adulta sino que yo he creado esto. Lo recogí de la ruina y he creado un espacio donde la gente puede ser lo que quieran ser. 

Pero el club Tentaciones esconde mucho mas detrás de su fachada impoluta y su ambiente de extravagancia. Compuesto por cinco planta abarca todos lo que una persona puede desear. Sexo, suerte o azar. Y es que recibimos desde presidente y gobernadores hasta lideres de las mafias mas poderosas del todo el mundo que vienen hacer sus negocios aquí. 

Porque en el club Tentaciones nos encargamos de todo, lo mismo hacemos desaparecer un cuerpo, como te damos información privilegiada de tu mayor enemigo. A la misma vez que en la planta cinco cumplimos con todos tus deseos mas carnales. 

Porque los limites los pones tu mismo y yo Nora Williams no tengo. 

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Esto es un pequeño prologo de la historia a parir del siguiente capitulo empezara la historia completa pero quería poneros en situación de como es el club tentaciones y como Nora es la que lo dirige. Quedan todavía muchos huecos en blanco pero poco a poco se entenderán.