Capítulo 1: Hablando de la casa...

15 0 0
                                    

1988, Estados Unidos de América, Estado de Nueva Jersey.

- Oye, David. ¿Sabes a dónde vamos tío?

Un grupo de jóvenes (compuesto por 3 personas) que eran David, Sally y Rich (llamado realmente Richard pero Rick sonaría muy distinto a su personalidad, por lo que preferiría más este último apodo). David estaba muy confiado en su decisión, tanto que ya estaban en frente de su destino: una casa abandonada, de hace unos 60 años aproximadamente. Los tres salieron del coche, cuando David le respondió a Rich:

- Confía en mí. Estará bien...

-David, ¿Sabes lo que haces? - le dijo Sally, su novia, al reconectar en la conversación entre David y Rich. 

David dio unos pasos valientemente, sin mostrar ningún temor y estando en todo lugar delante de sus amigos. Para comprobar si había algún vagabundo o algún otro que había tenido la idea de ocupar la casa, tocó al timbre dorado que tenía a su derecha. Sonó alegremente, a pesar de su anciana edad. Todos se sorprendieron al ocurrir esto, puesto que no se esperaban para nada que sonara. La puerta se abrió, ya continuación Sally y Rich decidieron correr hacia la puerta. Los tres se asomaron e inclinaron lentamente hacia delante pero no encontraron a nadie.

Efectivamente, estaba totalmente abandonada. Sally recuerda haber visto un cartel amarillo y negro anunciado por el condado en el que se encontraron que ponía: "AVISO DE DEMOLICIÓN, no estar en el lugar de obra". Como se nota que no les importaba en absoluto, ninguno de ellos había hecho caso alguno. En cuanto dieron dos o tres pasos, dependiendo de en quién nos fijemos, la puerta se cerró bruscamente. Ninguno había sido, pues estaban a una lejana distancia para agarrar el pomo y cerrarla. Todo era muy misterioso... Dentro era como si estuvieran en una película de misterio de los años 30, específicamente de cine negro. Todo tan sombrío, todo tan oscuro. No sabían por qué pero les atraía.

- Joder, David, sí que mola este lugar... a pesar de - hizo una pausa corta - su interior, sí. ¿Cómo te enteraste de esto?- dijo Rich, estudiando cuidadosamente (bueno tocaba todo lo que tenía en su mano, quién no lo haría en un lugar tan curioso, ¿no creéis?

- Mi padre ya me habló de esta casa... no se sabe a quién perteneció, muchos dicen que era de un escritor, otros que esta así por que está encantada y hay fantasmas y esas cosas aquí dentro. Y bueno, me interesó y confié en que os gustaría jajjaa - David era famoso en su instituto por ser muy inteligente, no había suspendido ningún examen o asignatura en lo que llevaba de vida. Puede ser frío a primera impresión, pero como dicen sus amigos, ya te encariñas con él en un tiempo.

- Ah, ¿cuentas conmigo? Nah es coña, me parece "chupi", como decís vosotros- Sally se giró mientras rebuscaba en los muebles hacia quien estaba contando la historia, su novio.

- Ehh, no decimos eso. Es una coña que tenemos y ya -Rich parece alguien más, alguien del montón, pero este círculo de amigos es conocido por ser imparable e inseparable, como muchos dicen. Al decir esto, se fijó en un libro de tapa dura y marrón que para él sobresalía de esplendor de entre los demás. Bordado bellamente en dorado, tenía como título: "Necronomicón" y si se bajaba un poco podía verse a simple vista "HP Lovecraft" (Quería hacer una coña en la que decía que sus apellidos se parecían a Minecraft cosa de la que me he fijado hace poco, pero claro, están en una época que no corresponden por lo que la broma como que no tiene sentido. Pero bueno quería dar este dato ya que me él acordó.) Vio que tenía el prefijo necro-, que en griego significa muerte, cosa de la que Rich sintió temor y algo de rechazo...

Estaban en el recibidor que el antiguo dueño se había convertido en una especia de biblioteca, por lo que habrían aceptado la teoría de que esta casa pertenecía a un escritor. Pero la verdadera pregunta era: ¿Por qué está tal y como se encuentra hoy en día? ¿Por qué su estado es tan desfavorable? No lo podrían saber, aunque si buscaran más a fondo podrían tener a respuesta (lo que pasa con cualquier cosa no te rindas jamás ;) Se encontraron con una sala, para Sally era una sala de lectura, por su relajado ambiente y por su imaginada iluminación y colores que había pensado en su mente; para Rich era la sala de música, ya que había visto un lujoso piano nada más entrar en la habitación. Una deducción poco improbable y nefasta, pero quién sabe. Por último, David no tenía ni puñetera idea de que podría ser la sala, pero pensó que sería de invitados por sus sillones escarlatas gastados, su alfombra que parecía quemada y una mesa dada la vuelta justo al lado. 

You've reached the end of published parts.

⏰ Last updated: Sep 25, 2022 ⏰

Add this story to your Library to get notified about new parts!

Olas de tinta (Waves Of Ink)Where stories live. Discover now