Capitulo 1

149 14 2
                                    

Una lenta y tétrica música comenzó a sonar de fondo. De golpe, unos focos alumbraron de pleno mi cara e impidieron que mi vista llegara mas allá de unos pequeños pasos mas adelante. Entonces como si se hubiera teletransportado, una cristalera apareció frente a mi y mis brazos y piernas comenzaron a moverse lentamente al ritmo de esa tétrica música. Alcé mi cabeza asustado ya que mi propio cuerpo no reaccionaba a las ordenes que mi cerebro le mandaba, viendo como finos hilos partían de la inmensa oscuridad del cielo hasta atarse a mis extremidades. Cada vez más asustado mi cuerpo iba quedando poco a poco como muerto, todo pesaba y no me podía mover ya que aquellos hilos tenían el control por mi. Cuando me quise dar cuenta estaba pegado a otra...¿Persona?...No, no, aquello no era una persona, sonaba como a madera cada vez que mi cuerpo y el de aquel ser inerte chocaban, pero entonces, fue cuando me di cuenta, aquel ruido solo se podía emitir sin dos maderas chocaban, por lo que con un esfuerzo sobre humano conseguí mover mi cabeza y observar que todo el estaba echo de madera, aquello me asusto, pero mas me asusto lo que vino después, giré la cabeza y me vi a Kris ahí, con los ojos abiertos y su semblante serio como siempre, pero algo fallaba, estaba como muerto, al verle de aquella forma mi cuerpo se destenso por completo, pues era completamente de madera...Nada cuadraba allí, y como si de nuevo me hubiera teletransportado una música algo más animada comenzó a sonar, esta vez estaba en una barca, muy familiar la verdad, y dos personas se encontraban de espaldas a mi, dos chicos, altos y de anchas espaldas, uno de un pelo rojo fuego y otro de un castaño oscuro, ambos cortos, y por mas que miraba y miraba, aquellas personas me eran muy familiares, pero no sabia de que, hasta que vio como aquellos se giraban a mirarse y se besaban. Poco a poco me empece a quedar blanco y mi boca se abría un poco, pero rápidamente como si no quisiera ver más de aquel recuerdo encogí mi cuerpo contra mis piernas y me tape los oídos, pues aquellos ¨Te amo¨ sonaban cada vez más fuerte y yo solo pude cerrar los ojos y comenzar a sollozar.

-¿Tao?

Una voz muy familiar resonó en mi cabeza y alcé esta rápidamente para ver a aquella persona, esta vez aparecí en la nada, era un lugar completamente negro, alumbrado por alguna luz que dejaba ver aquella inmensa nada en la cual destacaba una camiseta roja con un 88 dibujado de color blanco en ella, con unos pantalones del mismo color y un pañuelo a juego ataco en la cabeza de aquel Kris muy lejano que mantenía una preciosa sonrisa en los labios y me tendía a mano. Yo con miedo tendí mi mano a aquella que me ofrecía y más levantarme con todas sus fueras, aquel lugar que nos rodeaba cambió por completo, un parque, un blanco banco que permanecía bajo un sauce y lo escondía un poco. Mi vista no podía dar mas de si pues las ramas tapaban toda visión al exterior de aquella pequeña burbuja de ramas y hojas. Un rubio Kris se paseo por delante mía con una ceja alzada y aquello hizo que volviera en mi.

-¿Tao, que piensas entonces?

Yo miré al chico confundido hasta que caí que día era aquel, el día en que Kris me ofreció ir a vivir con el, lo volví a mirar y nuevamente antes de poder hablar siquiera ya había cambiado todo de nuevo. Me sentía fatigado, cansado, mi cuerpo estaba y estaba sudado, pero unas suaves sabanas de seda, muy conocidas para mi, tapaban mi desnudo cuerpo. Andaba algo confundido, por lo que giré la cabeza y me vi a Kris con el pelo un poco más largo que antes dormir pacíficamente a mi lado, completamente desnudo también. Aquello no podía estar pasando, ¿cuantos recuerdos había vivido ya? Cerré los ojos como si quisiera despertar de aquella pesadilla, grite con fuerza y solo oí mi propia voz haciendo eco, pues más abrir los ojos me encontraba de nuevo en aquella inmensa oscuridad, pero esa vez...

Un chico espaldas a mi con una maleta se mantenía inmóvil, un sollozo de competo dolor se podía oír perfectamente, entonces ahí estaba yo, con mi pelo rubio y mi cuerpo mas delgado de lo normal, tirado en algún lugar de aquel sitio tan oscuro, llorando y temblando... Si no me equivoco...Aquel día Kris...

DreamerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora