El prometido del Rey [☀️Sun x Moon🌙]

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"Príncipe Sun... Despierte"

El joven príncipe despertó desconcertado, lo primero que vio fue un chico de unos doce o trece años

"Quién eres...?" Preguntó el rubio.

"Soy Gregory, su sirviente asignado... Desde ahora mi deber es protegerlo, príncipe Sun" Dijo para luego sonreír "La fiesta pronto va a comenzar, debería vestirse"

"Eres muy j-joven para este trabajo, no lo crees? Y qué fiesta?" Dijo nervioso

"Príncipe, llevo preparándome toda mi vida para servirle a la próxima Reina, ser hijo del jefe de las y los sirvientes tiene sus ventajas" Bromeó y soltó una risa inocente "La fiesta será para usted, el pueblo está muy emocionado por la llegada de su próxima Reina!... O bueno, la mayoría"

"O-oh... Supongo que no le caigo bien a toda la gente" Dijo en un tono triste.

"No se preocupe por eso, tendrán que aceptarlo tarde o temprano" Se dirigió al closet y lo abrió, dejando ver una variedad de vestidos y trajes "dígame, hay alguno que le interese?" Refiriéndose a los trajes

Sun se levantó de la cama y entró al closet, era enorme y tenía una gran variedad de vestidos.

"...Este me gusta" agarro un vestido.

El vestido era simple, la falda no era ni corta ni larga, era de un color amarillo pastel que de iba degradando a un tono más anaranjada. Era acompañado con un lazo naranja degradando al rojo se colocaba en la cintura.

" Ouh, tiene buenas elecciones, Prínci-"

"Dime Sun, por favor" sonrió

El joven sirviente asintió, un poco apenado. Tomó el vestido y luego se acercó a Sun para entregárselo.

"S-sun, nuestras leyes me prohíben ver su cuerpo, solo el Rey Moon es capaz de verlo... E-espero que no le moleste" apenado

"No importa, Gregory. Pero voy a necesitar ayuda con el lazo" sonriendo

Gregory asintió y se volteo, el joven príncipe se puso el vestido, le quedaba a la perfección y le encantaba.

"Waa! Es hermoso" Dijo mientras movía levemente las caderas para que el vestido se mueva

"Le queda hermoso! Déjeme ayudarle" el sirviente se acercó y le acomodó el vestido, luego le puso aquel lazo rojizo en la cintura del más alto.

Estuvieron un buen rato arreglando, escogiendo tiaras y dando un retoque a la cara del príncipe, cuando terminaron, un señor con rasgos animales abrió la puerta.