Cuando iba en primaria creía que nunca iba a tener atractivo para nadie, y la verdad que es algo bastante tonto, tenía 10 años y estaba enamorada de un chico de mi salón, él era muy inteligente y bastante atractivo, aunque ahora con más edad me veo las fotos y pienso que estaba cegada.
No me consideraba linda, solían molestarme por el color de mi piel, por siempre estar enferma y en palabras de ellos por ser bastante sabionda, solían hacerme llorar hasta reducir mi autoestima a los suelos, pero aquel niño fue el único al que no le importo hablarme, y en mi cabeza eso significaba que tenía una oportunidad con él, y saben ahora que lo pienso es bastante hilarante, era solo un niño, a comparación mía que siempre he sido una soñadora con las emociones a flote, el solo pensaba en carritos, luchas y aviones; sin embargo un 14 de febrero tuve la grandiosa idea de confesarme, le entregue una carta y unos pastelillos hechos por mí con ayuda de mi madre (Ahora que lo pienso puede de este suceso venir mi odio por la cocina) y enfrente de todo el salón le entregue las cosas, el las tomo y ahí junto a sus amigos leyeron mi carta, y en voz alta me dijo unas palabras que marcaron el inicio de una serie de sucesos y problemas amorosos que hasta hace poco hicieron mi vida complicada; cito "No quiero ser el novio de una niña como tú, eres fea y tonta."
Adiós autoestima y hola versión antigua que se llevará todos los golpes.
Aquí el inicio de esta guía contra un corazón herido.
Y si querían saber he decidido llamarme Alicia...
ESTÁS LEYENDO
Cartas a mi querida yo
RomanceCuando empecé a salir en relaciones cometía equivocación tras equivocación, terminaba envuelta en situaciones embarazosas y complicadas, que me hubiera gustado contar en su momento, pero al no tener con quien hablarlo e terminado escribiendo cartas...