✰ ೃ ❛ Father ❜┊Final Space fanfic┊『 Trans Avocato 』┊🏳️‍⚧️ ♡ .

❐; el inicio.

P.O.V. Avocato:

Crecer rodeado de guerreros es complicado pero a la vez se siente más libertad, en Ventrexia no somos tan apegados a esos famosos "roles de género" que tienen los humanos, mujeres y hombres pelean por igual, sin embargo si hay algo del cual es un problema, somos demasiado orgullosos, como siempre hemos estado en guerra, nuestros conceptos de "género" están muy al aire pero aún así, si una mujer empieza a llamarse así misma "hombre" o al revés, se les condena de por vida, hasta parecen odiarles más que a los trivulianos. Obviamente como yo estoy contando esta historia, pues es porque tuve la maravillosa suerte de ser uno de ellos, es complicado explicar, pero creo que nunca encajé en la palabra "mujer" como tal, había algo que me incomodaba, y no porque crea que ser mujer es inferior, simplemente algo de serlo no cuadraba conmigo.

Nunca quise hablarlo con mis padres, en especial mi papá, él era un traumadito por lo de la guerra, sólo quería que yo saliera y luchara por "nuestro honor", por Ventrexia, pero yo no quería matar, esos trivulianos son grandes y amenazantes pero sé que cómo nosotros, sólo se están defendiendo. Lo peor es que nadie sabe porqué carajos estamos luchando, no tiene sentido, no hay registros históricos, no hay videos, no hay nada, sólo sabemos que esta guerra ha durado un maldito milenio, traen niños al mundo para combatir, los Reyes están bien cómodos en su búnker y oí rumores de que planeaban un escape...

Cobardes...

Así que ahora estoy parado, con cara de idiota con los brazos alzados porque están tomando mis medidas para crearme una armadura.

❝El tamaño del pecho será más grande, para que no le aplaste❞. Escucho a mi papá hablar, lo que me hizo suspirar, lo que daría por que la maldita herencia por parte de mi madre se hubiera saltado mi generación, tener senos grandes es un horror, rebotan con cada paso, te pesan la espalda y es un asco encontrar camisas con la talla exacta, ahora imagínense una armadura, había dicho mil veces que no quería hacer esto pero mi papá jamás escucha.

"El gran general Almeowndra", así lo conocen, yo sólo le digo "Al", no me gusta llamarle "papá" y no le voy a llamar por ese estúpido nombre, así que sólo le digo así, igual a él no le importa, creo que poco le importa que seamos familia biológica; a quien sí aprecio y amo es a mi madre, "La Guerrera Sucat", es raro su nombre, se pronuncia "Shucat" pero por la forma en cómo se escribe, muchos la llaman de esa manera. Mi madre es la persona más dulce y tierna que podría existir, a pesar de que es capaz de matar a 100 tipos en un minuto, ella es tan cuidadosa y cariñosa, siempre me presta toda la atención que necesito y me ayuda cuando discuto con Al, aún no entiendo cómo es que un ángel como ella se emparejó con un monstruo como él, supongo que le gustaba que la trataran de a menos, no sé, no juzgo fetiches.

Apenas tengo 16, soy técnicamente un adulto para Ventrexia pero como nada sirve aquí, no puedo hacer lo que quiero, no puedo cambiar mi nombre, no puedo quitarme estas estúpidas sandías que tengo por pechos y no puedo hacer que oficialmente me reconozcan como un hombre, supongo que la única ventaja de la armadura es que casi nadie se da cuenta de ello, han habido veces que a algunas chicas les llaman "soldados", cielos, ese es mi sueño, pero espero que sea cuando mi padre no esté cerca o él indignado será él y le dirá a todos que soy una soldadA. Lo odio.

Igual, hace poco conocí a un chico, Catrrot, un ventrexiano cuyo pelaje es completamente negro, sólo una pequeña mancha blanca en su mano izquierda, es tan lindo, no puedo creer lo rápido que nos hicimos amigos, él es dos años mayor pero creo que nos complementamos muy bien, él sabe mucho de la vida y lo mejor, ¡respeta mi identidad! Cuando mi nombre sale de sus labios me hace sentir una corriente eléctrica por toda mi médula espinal, cuando me dice "amigO" o "compañerO", me hace caer a sus pies, lo cual, pensándolo bien, era como para que me preocupara pero... a la mierda, creo que encontré mi alma gemela. Los entrenamientos de los guerreros no eran tan malos cuando estaba con él, me enseñaba muchas técnicas y trucos, aparte de cómo usar bien un arma, para que la inercia del disparo no te jugara en tu contra, Catrrot era perfecto, no me imagino a nadie mejor, tal vez incluso él sea...

[...]

❝Woow, esto es genial❞. Mis ojos no podían creerlo, el cielo estaba medianamente despejado, casi podía ver el azul del cielo, ¿ese acaso era nuestro sol? ¡No sabía que tenía tanto brillo! Y había algo mejor, ¡una casa! No era una guarida, no era un búnker, era una casa, rústica y de madera, oh cielos, jamás creí emocionarme tanto por una casa pero esto se veía como los anuncios intergalácticos que a veces llegan en revistas, era como... algo nuevo.

❝Sólo lo mejor para ti baby❞. Solté unas risas, podía sentir mis mejillas calentarse, desde que nos conocimos hace tres años él no había parado de llamarme así, me encanta, me hace sentir aún más especial, saber que sólo a mi me llama de esa manera, mi corazón palpita y quiero gritar.

Estoy tan emocionado porque este podría ser el inicio de una nueva era en Ventrexia.