SEMPITERNO - KTH & JJK

Two: Angel on earth

"No se trata de cuál vida es más importante"

"Taehyung..." el omega le susurra, apretando la mano de su alfa en la propia, sonriendo luego. "He decidido darle el peso suficiente a su vida como para..."

El alfa niega, separándose del omega, sus labios temblando cuando suplica.

"No lo digas, por favor"

Jungkook se traga un sollozo y extiende su mano nuevamente a Taehyung, abrazándolo luego, ambos con ojos acuosos e ilusiones rotas.

"Déjame ir, ¿sí?"

El alfa niega, con lágrimas silenciosas deslizándose por sus mejillas. El omega besa sus párpados, evitando exteriorizar el dolor en su pecho cuando logra tomar entre sus manos el rostro de su alfa, quien lo mira con el mismo vacío.

"No, yo- te amo, más que..."

Jungkook lo presiona contra sí mismo nuevamente, no queriendo escuchar lo que su alfa está por decir y se limpia las mejillas con el dorso de su mano.

"Estás molesto, lo entiendo, pero..." se interrumpe a sí mismo, apretando sus labios y con dificultad se obliga a tragar su bilis. Taehyung acaricia el cabello de su omega y sostiene la mano que empuña su uniforme, "no desaproveches el tiempo que nos queda de esta manera"

Taehyung se apoya en el pecho de su omega, olfateando apenas de su esencia a naranjas y canela, lo que queda de ella porque justo ahora todo huele a histeria. Su propio lobo rasguña su interior ante la inminente pérdida, pero Taehyung no se haya dándole atención a eso cuando Jungkook lo rodea con sus brazos.

"Quiero que lo ames tanto" le murmura, acariciando los mechones oscuros de su alfa, quien solloza en silencio. Se permite olfatear de su esencia a fresas y sonríe triste. "Es como tú, al menos eso quiero creer...es una cosita pequeña y frágil"

Las lágrimas se deslizan por sus mejillas, pero Jungkook está más concentrado en disfrutar del último momento con su alfa que de su propio lobo que se retuerce de dolor.

"Amalo por los dos, ¿sí?"

Seúl.

Su amada ciudad, Jun piensa, mientras ve por la ventana del vehículo de su padre el gran letrero que anuncia su llegada a la capital. Regresa a su asiento, suspirando y tarareando la sinfónica que su padre siempre escucha.

Se siente feliz por las pequeñas vacaciones que su padre se está tomando del trabajo, el tiempo que le está dedicando, no creyendo que después de mucho su padre lo esté acompañando a algo tan simple como una fiesta de niños. Taehyung está manejado únicamente a Seúl para ir a aquella fiesta con su hijo, decidiendo volver en la noche a Daegu.

"¡Papá!" Taehyung se sobresalta y abre demás sus ojos, con una horrible sensación de vértigo instalándose en su estómago cuando su hijo salta a sus brazos, sonriendo con su perfecta sonrisa cuadrada y arruguitas en sus ojos, ajeno a la sensación que provoca en su padre al saltar desde el estrado. "Mírame, papá"

El niño aplasta las mejillas de su padre cuando lo tiene en sus brazos y ladea la cabeza.

"Me veía genial, ¿cierto?" le dice, cuando es dejado en el suelo, limpiando las gotas de sudor que se deslizan por su frente con el dorso de su mano, haciendo un puchero cuando recibe la toalla que su padre le extiende para limpiarse correctamente. "Mi profesor me ha felicitado tantas veces que he perdido la cuenta. ¿Cómo se está portando, Jisso?" cuestiona, observando la pequeña caja térmica que su padre carga. El niño mira por sobre el cristal a la pequeña tortuga esconderse. "¿No está muy inquieta? Debe de tener miedo a estos niños...quiero decir...a mis amigos"