Capítulo 1

10 0 0
                                    

En un lugar de África; en un palacio nacieron dos niños (no son hermanos), Simba y Nala, después de que presentaran al primero pasó el tiempo y se hicieron mejores amigos.

Nala: rubia, pelo rizado y largo, ojos azules, 1'50 de altura ("pequeños") 1'60 de altura (adultos)

Simba: pelirrojo, ojos castaños, 1'60 de altura ("pequeños") 1'70 de altura (adultos)

Historia:

Simba después de que fuera a ver a su tío, se dirigió a ver a Nala, ya que se había enterado de un sitio genial. Obviamente le dijo que estaba "cerca" del manantial porque estaban sus madres delante, ellos en ese momento se encontraban en la zona de baños del Palacio ya que los iban a bañar.

(Simba entra corriendo para buscar a Nala)

Simba: ¡Nala, Nala! Me acabo de enterar de un lugar genial.

Pero antes de que Nala respondiera, Sarabi le preguntó a su hijo.

Sarabi: Y, ¿dónde está ese lugar?

Simba que no se esperaba esa pregunta, no sabía que responder.

Simba: Eh... Cerca del manantial.

Nala: ¿Qué tiene de interesante el manantial?

Simba (al oído de Nala): Te lo digo cuando lleguemos.

Nala: Mamá, ¿puedo ir con Simba?

Sarafina (a Sarabi): ¿Tú que dices Sarabi?

Simba y Nala pusieron ojitos para que los dejaran ir.

Sarabi: Está bien, pero Zazú os acompañará.

Simba y Nala pusieron cara de indignación, y se bajaron a la entrada del Palacio a esperar a Zazú.

En cuanto Zazú llegó, nos fuimos en dirección al manantial, pero Simba y Nala iban hablando por detrás de Zazú.

Nala: Entonces, ¿a dónde vamos?

Simba (al oído de Nala para que Zazú no oiga): Al cementerio de elefantes.

Nala: ¡Wow!

Simba (le tapa la boca con su mano): No grites, está Zazú.

Nala: Cierto, hay que distraerlo.

En eso se les ocurrió una idea, y a toda la gente que veían



Entregando el corazónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora