•CHAPITRE TROIS•

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"Deuxième regard"
1 de Enero 2022
(11:24 a.m.)


La noche de ayer fue una locura, no recuerdo ni mi nombre pero con la resaca que tengo puedo adivinar que fue un desastre. Hyuk no dejaba de mandarme mensajes, todos ellos eran en mayúsculas e insistentes.

-SUN HAEE!!! ¿SE PUEDE SABER PORQUÉ NO CONTESTAS EL MALDITOS CELULAR?-. Hyuk gritaba con enojo, yo solo alejaba el celular de mi oído, la resaca me matará.

-Hyuk...., ¿puedes bajar tu tono...?-. parecía susurro, ni yo me escuchaba.

-Sunniee, ¿estas bien? no me digas que tomaste como pozo sin fondo-. irritada me tape con las sábanas.

-mmm... jejej... ¿no?- ni yo me creo.

-Maldita sea! tu tomando mientras el mundo se va para abajo, ¿sabes porque te llamé?- notaba su poca paciencia.

-No, y no quiero saber, tengo que cambiarme tengo mucho que no voy al gimnasio empiezo a ver borroso- bromee.

-Mejor, trata de despejar tu mente... después te digo lo que pasó- dijo, mientras algunos ruidos de un vaso se escuchaba de fondo, seguro de estaba haciendo su café mañanero.

-Bien voy a colgar... Adiós-. me despedí y colgué antes que me dijera adiós. 

Me levanté, busqué algo que ponerme, bajé a desayunar poco después dio la hora de salir, tome mis llaves y arranqué en dirección al gimnasio.

[...]

4:56 p.m.
(en el gimnasio)

Llegué mas temprano de lo normal, entré, saludé a Lucas el esposo de Ha-ri y me dirigí a las máquinas de cardio y  tome mis audífonos.

Llevaba 5 minutos ahí, trataba de distraerme observando cada espacio del lugar, mis ojos pararon repentinamente, pareciera que fue un movimiento involuntario, mi mirada permaneció haciéndose algo eterno, no sabría explicar el motivo de mi atención, fue como un imán atrayéndome inmediatamente.

Aleje mi mirada al instante, agache mi cabeza y me enfoque en la música que viajaba por las vías de los audífonos, aunque fuera la persona mas curiosa del universo no dejaría que la tentación se apoderara de mi.

Fueron en vano mis pensamientos, al final levanté la mirada y seguí admirando la vista. 

Nunca había visto a alguien así, tenía la intención de preguntarle a Ha-ri quién era el, mi curiosidad me mataba, no sabía si los efectos de la resaca me estaba jugando mal y veía cosas que no eran, tanto me perdí que no me di cuenta que ya llevaba 20 minutos corriendo.

-Tsh maldita sea-. dije mientras descansaba, y tomé agua.

Un brazo rodeó mis hombros, Ha-ri se encontraba a un lado mío y quite mis audífonos.

-Aigooo, mi sunniee, feliz año nuevooo ¿llegaste temprano? Lucas me dijo que habías llegado, te veo un poco sonrojada, ¿estas bien?-. Ha-ri bombardeaba de preguntas y yo solo la miraba con signos de interrogación, aun no salía de mi trance.

Al final reaccione, formule las palabras que diría y respondí. 

-Iguaal, algo así.... aahh y esto- me señalé.- Fue porque corrí mas de lo normal, seguiré entrenando- dije nerviosa.

VOIR | JOHNNYDonde viven las historias. Descúbrelo ahora