- ¿Sera posible? -

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Red se encargó de lidiar con el Equipo Rocket sin ayuda de Blue. De lo contrario que pensaba Blue que Red sentía, se lo tomó de buena forma dentro de lo que cabe. Mentiría si dijera que Red no quería tener una ligera ayuda.

Venció a Giovanni de nuevo y se le dio la Master Ball, la cual podía atrapar a cualquier pokemon sin fallar. Fue entonces cuando Red empezó a hacer planes y pensar, ¿que pokemon especial atraparía con ella?

El joven entrenador salió del edificio y se dirigió al Centro Pokemon a curar a su equipo.

Salió rápidamente de ahí, no tenía ya mucho que hacer en Ciudad Azafrán.

- ¿Que podría atrapar Blue con una Master Ball? - Pensó en voz alta el entrenador Red. Charizard, su compañero, estaba aún presente y a su lado, y al escuchar esto, colocó su cabeza en el hombro de su buen entrenador.- Aw.. ¿Que sucede Charizard? ¿Te agrada Blue? - Preguntó curioso el joven Red.
- ¡Chari - zard! - Recibió por respuesta un "si"

A Red le agradaba que su más fiel compañero le agradara estar cerca de su rival.

- Ya veo.. Bueno, Chari, puedo confiar en ti.. ¿Cierto? - Preguntó con un tono.. ¿Apagado?
- Char! - Respondió Charizard.
- Eh... Lo qué pasa es que me siento diferente al lado de Blue.- Hablo Red.
- Zard?
- No me malinterpretes.. Aún disfruto estar con el, solo que.. No me siento de la misma manera, pero no es ningún sentimiento malo.. ¿Tiene sentido? - Continuó hablando.

Charizard solo miró de manera confundida pero asintió con la cabeza.

- Sabes, Blue últimamente se me ha hecho más.. Eh... Como decirlo?..- De repente Red se había puesto nervioso.-.. Siento que quiero estar más unido con el..- Fue lo único que se atrevió a decir, pues lo que pensaba era muy vergonzoso.

Vista Blue:

Caminé a Ciudad Verde lo más rápido posible, intente alejarme de Green, pues lo que me había dicho me provocó estar pensando en eso. Necesitaba alguna distracción, revisé mi equipo, afortunadamente estaban todos en buenas condiciones.

Sabía que el gimnasio había estado cerrado por mucho tiempo, decidí que revisaría cómo entrar lo antes posible. Para mi buena suerte, el gimnasio sorpresivamente estaba abierto, nunca pensé que sería tan fácil.

Vencí a todos del gimnasio sin problemas, mi Blastoise hacía un gran trabajo.

Al poco tiempo llegué al líder, para mi, era un líder común y corriente, pero esa R me parecía extraña.

Como lo había hecho antes Blastoise, destrozó el equipo entero del líder gracias a que era un gimnasio de tipo tierra.

- ¡Ha! Eso fue muy fácil! - Le dije al líder.
- Hmph... Supongo que te has ganado la medalla, niño.- Me respondió secamente.

El líder me dio la medalla y la guardé donde las demás medallas que tenía estaban guardadas.

Salí del gimnasio, me había servido pasar un rato concentrado con las medallas. Me di cuenta de una cosa, algo muy grande e importante.

-... Ya puedo ir a la liga...- Dije en voz baja afuera del gimnasio.-..¡Ya puedo ir a la liga! -Grite esta vez.

No podía creer lo lejos que había llegado en tan poco tiempo.

- ¡Ha! ¡Ahora podré ser el campeón de Kanto antes que el! - Volví a gritar.

Sin darme cuenta, una pequeña lágrima salió de mi, quizás fue por la emoción.

- ¿Porque tenemos que perder más tiempo? Es momento de irnos.- Dije mientras miraba la pokeball de Blastoise.

Vista Red:

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