ANDREA

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Le hablé a la luna de ti y empezó a llorar
Parece que se acordó del día en que te conocí
Blanquita, tierna , ojos color cafés
Es indescriptible todo aquello que sentí,
Al mirar tus ojos pude ver toda aquella soledad
que arrebataba tu alegría y toda tu felicidad
Cada día para tí era pésimo, como un barco sobre al mar
Resistiendo cada ola aún sabiendo cómo va a terminar.

Su destino era cruel , cayendo la noche empezaba a llorar
La depresión la consumía y con ella la anciedad
¿Cómo unos ojos tan bonitos podían estar llorando sin parar?
Su cielo era oscuro y la vida la golpeaba sin piedad,
Quizás un día ella solía sonreír aunque sea un poquito
Pero ahora solo son recuerdos que lastiman su mente
Y ojalá las cosas fuesen distintos
ojalá no fuera criticada y menospreciada por la gente.

Su rostro tallado por los mismos dioses del Olimpo
El rojo de sus labios hacen resaltar los delfines del mar
Quizás Andrea tenía un propósito
Pero la depresión le arrebató esa sonrisa que algún día ella solía mostrar,
Y yo sigo aquí tratando de hacerla sonreír
Tratando de hacerla ver toda su hermosura
Tratando de que tenga ganas de vivir
Tratando de que brille aunque su vida sea oscura.


—Dilan Lpr

Nota: esta poesía está dedicada a alguien que fue temporal pero que valió la pena conocer.

30 Poesías De Un Corazón RotoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora