Capítulo 1

937 38 18
                                    

La historia comienza con un joven mexicano llamado John de 18 años, era alto, delgado y siempre ha disfrutado la música, pero debido a problemas personales, decide mudarse la casa de sus abuelos, ellos han fallecido hace años y se la heredaron a él hasta que tuviera la mayoría de edad. Al llegar a su nueva casa, se da cuenta de que tiene algunos muebles rotos, y mucho polvo, así que lo primero que hace es limpiar la casa, lo cual le tomó 4 horas hacerlo, un poco cansado se sienta en uno de los sillones, y comienza a reflexionar.

John: Me alegro mucho volver a Londres, solo quisiera que al menos me recibiera mis abuelos, según dijeron mis padres, murieron ahogados mientras estaban pescando, al menos sé que ellos están conmigo.

Eso lo puso triste, entonces decide se le ocurre una idea.

John: Ya que estoy aquí, puede que sea buena idea tocar música en el parque que vi cerca de aquí.

John toma su estuche, una boina y una chamarra, se va de la casa y comienza a irse al parque.

Mientras que, en otro lado, se encuentra una casa grande, y ahí estaba una dálmata deslizándose en las varillas de las escaleras, divirtiéndose, pero alguien estaba molesto por ella.

???: Dolly, ¿Qué estás haciendo?, se supone que debes estar ayudando a limpiar.

Dolly: Lo estoy haciendo Dylan, estoy limpiando las varillas, oh aún falta otra limpiada.

Dolly corre de nuevo a deslizarse en las varillas, mientras que Dylan suspira.

Dylan: Olvídalo, solo termino de limpiar la cocina y nos vamos.

Dolly no le prestó atención, y Dylan comienza a limpiar la cocina, le tomó algo de tiempo, pero pudo terminar y se sintió satisfecho.

Dylan: Al fin todo está limpio, muy bien, ahora podemos ir al parque.

Al decir parque, se sintió como un terremoto, hasta que ve que vienen primero Dolly con su patineta y luego llega sus hermanitos, entonces todos se van al parque a jugar.

Al llegar todos juegan felizmente, mientras que Dolly estuvo patinando por varios lados, haciendo algunas acrobacias.

Dolly: Y aquí va la mejor patinadora.

En una de las acrobacias, rebasa a Dylan que se asustó por lo rápido que fue su hermana.

Dylan: Dolly, te cuidado que casi me aplastas.

Dolly dice desde lejos.

Dolly: Lo siento.

Dylan no le presta atención y continúa jugando con algunos de sus hermanitos.

Mientras que, en otro lado se encuentra John estaba cerca de llegar al parque.

John: Bueno, al menos aquí podré tocar música, espero que no me vengan a interrumpir como en México.

Aunque por sorpresa ve algo inusual para él y era una perrita patinando, eso le dio un poco de risa.

John: Vaya, eso si no se ve a diario.

Dolly estaba a punto de hacer una acrobacia más, pero se destruyó una llanta e hizo que perdiera el equilibrio, cayó y se da cuenta de que estaba en la calle, un auto estuvo a punto de atropellarla, ella estuvo a punto de llorar.

Dolly: AY NO, NO, NO, NO, NO.

Ella se cubrió los ojos, hasta que se da cuenta de que no le pasó nada y fue porque John la cargó, Dolly ve su cara y comienza a sonrojarse.

Dolly (pensando): Oh, por dios, este humano me salvó y es guapísimo.

John la dejó en la banqueta del parque y se arrodilla un poco.

John: ¿estás bien?

Dolly se sonroja y se pone nerviosa al contestar.

Dolly: S...Sí, gra...gracias humano.

John solo escuchó ladridos ya que los humanos no se pueden comunicar con los animales, así que solo sonríe un poco y recoge la patineta.

John: Toma esto es tuyo, cuídate.

John se iba a meter al parque, mientras que Dolly solo lo ve.

Dolly (pensando): Ese humano, no me entendió, cierto no nos entiende nuestro lenguaje, pero voy a agradecerle.

Dolly comienza a seguir discretamente a John, se escondió en unos arbustos al frente de él, mientras que él estuvo sentándose en una banca, saca su guitarra del estuche, y la afina un poco.

John: Bueno, aquí voy.

John empezó a tocar una canción algo lenta y comenzó a cantar, cantaba una canción algo personal para él ya que le recordó un momento de su pasado, al terminar de cantar, solo suspiró un poco y reflexiona viendo el cielo, Dolly al escucharlo cantar, se queda pensando.

Dolly (pensando): ¿Qué es...este sentimiento?, es solo un humano, solo un...

Dolly al verlo, ve a un chico guapo que lo salvó de una muerte, y eso pone tan feliz que hasta mueve su cola.

Dolly: ...GUAPOTE.

John escuchó ese ladrido y ve a Dolly, ella se quedó algo asustada así que decide solo irse corriendo, John se puso confundido.

John: Que raro, ¿Por qué huyó?, bueno no importa.

John continúa viendo el cielo y sonríe un poco. Mientras que Dolly corriendo estuvo demasiado avergonzada.

Dolly: Que vergüenza, que vergüenza, que vergüenza, que vergüenza.

Pero en un instante choca con Dylan, él se queda algo molesto.

Dylan: Dolly, ¿Por qué corres así?

Dolly: Lo siento, me tengo que ir.

Dolly corre tan rápido, y puso a Dylan algo confundido.

Dylan: ¿Qué le pasa?

Al ser de noche, John regresa a su casa, guarda su estuche con su guitarra, se toma un baño rápido y prepara la cama, aunque nota que algo estaba oculto debajo del colchón.

John: ¿Qué es esto?

Lo saca del colchón, y se da cuenta de que es un regalo con una tarjeta que decía.

"Sabemos que te gusta tanto los animales, así que compramos esto para que conozcas más de ellos"

- Tus abuelos

John: Mis abuelos, querían darme un regalo, bueno les agradezco de corazón que me regalaran esto, aunque no sé qué es.

Entonces abre la caja, y se da cuenta de que una especie de audífonos.

John: Genial, audífonos, se ven increíbles, a ver si se conecta con mi teléfono.

John se pone los audífonos, pero al intentar conectar al celular y reproducir música, sintió que algo lastimaba sus oídos, y comenzó a gritar mucho.

John: ¡AHHHHH!, ¡MIS OIDOS, NO OIGO NADA!

John trató que quitarse los audífonos, pero se pegaron, entonces tuvo que seguir soportando un dolor tan grande que era como si le taladraran el cerebro, tardó un poco hasta que los audífonos se apagaron y él cayó desmayado de tanto dolor.

Mientras que, en otro lado, Dolly estuvo en su cama cubriéndose de vergüenza por lo que pasó.

Dolly (pensando): Sé que no me entiende, pero que vergüenza, le dije eso frente a él. Aunque sí es bastante guapo, y un buen músico, me encantó su canción, también es un héroe que me salvó la vida.

Mientras más pensaba eso, más recordaba la cara y la voz de John, eso la pone demasiado sonrojada que se golpea en la cara con la almohada, hasta que comienza a respirar profundamente, ve la patineta que se rompió y le dio, comienza a decir.

Dolly: Tengo que agradecérselo, mañana espero que regreses...Mi héroe.

Dolly comienza a dormirse tranquilamente sonriendo, esperando con ansias que pueda volver a ver a su héroe.

FIN del capítulo. 

Mi InspiraciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora