Buen Sexo = Amor

20 1 0
                                    

«Como cuando te gusta alguien solo para coger y resulta que coge tan rico que te enamoras»

Leí eso y lo primero que se vino a mi mente fue ella, es curioso porque con ella tuve sexo casi al final de nuestra relación pero antes de eso pasaron muchas cosas.

Ella era una chica hermosa, cuerpo esbelto y bien proporcionado, tenía todo lo que uno puede buscar en el físico de una chica.

Al principio, cuando solamente eramos amigos, ella me contaba los malos ratos que pasaba con su novio pero entre los juegos que hacíamos de “verdad o reto» u otros tipos de juegos, yo siempre aprovechaba y preguntaba cosas muy íntimas, ella también lo hacía conmigo pero era muy poca para eso, era obvio que solo me veía como su amigo y no le interesaba saber mis cosas personales, yo si, y yo si era bien curioso, ella se prestaba a esos juegos y yo aprovechaba.

Gracias a esos juegos me confesó que le encantaba coger en el carro de su novio, que mientras el conducía, a ella le fascinaba hacérselo oral, que era muy abierta para el sexo, incluso más que su novio.

Esos juegos se volvieron mi pan de cada día, inventaba uno cada cierto tiempo para poder hablar de esas cosas con ella, llegó un momento que ya no me era suficiente escucharla o leer sus respuestas. Empecé a enviar juegos donde le tocaba cumplir con fotos o videos; al principio ella como que no le gustaba la idea, pero para ese tiempo nuestro nivel de confianza era muy grande.

Empezamos con fotos normales, ella en shorts y brasier, yo con eso me sentí más que complacido, la chica mas sexy, y yo podía verla así.

Llegué a pensar que eso era lo máximo que podía obtener con ella, ya que se notaba que poco le gustaba, no por desconfianza sino porque ella decía que le gustaba que la vieran mejor en persona, claro eso era para su novio, yo solo era su amigo.

Los juegos cada vez se ponían más interesantes, más atrevidos y ella no se negaba, ahora sus fotos eran en lencería sexy, yo era feliz viéndola así, me excitaba tanto.

Un dia decidí enviarle uno que sobrepasaba los limites, me arriesgue, tenía dos opciones: o me insultaba y se alejaba de mi o me cumplía una fantasía que tenía con ella.

El reto era hacer un «Pillow Humping»
Eso es ponerse una almohada, montarla y moverse como si estuviera cogiendo con alguien.

Para mi sorpresa ella aceptó, claro esperaba que lo hiciera con ropa y ver solo sus movimientos, pero... Para mi sorpresa, lo hizo en ropa interior.

El solo ver esa clase de movimiento, era algo indescriptible, era una licuadora, no se como llamarle, esos movimientos eran propios de una diosa del sexo y ahí estaba yo, apreciando eso y muriendo de celos imaginando como cogia con su novio.

Todo lo que habíamos hablado de lo abierta y buena que era para el sexo, y que yo pensaba que solo estaba presumiendo, ahora me lo confirmaba.

El próximo reto fue ver como lo hacía oral, otra vez me sorprendió con otro video, ahora chupando una paleta, la envidia que sentía al ver ese video, yo deseaba que mi pene fuese esa paleta. Ella resultó ser garganta profunda, se la metía y sacaba, le cabía toda, usaba su lengua y labios de forma magistral, lo repito, era una diosa del sexo.

El tiempo pasó, creo que le empecé a interesar, quizá sólo porque siempre estuve para ella cuando tenía problemas con su novio, empezamos a tener un tipo de relación free, ella terminó esa relación con ese tipo, y luego apareció el otro.

Por muchas situaciones, aunque yo le gusta y ella a mí, me encantaba, nunca pasábamos de besos y ya, creo que la respete demasiado, sentía que debía esperar más para proponerle tener sexo.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Apr 06, 2022 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Una buena cogida no se olvidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora