El amante de la Hokage [MenSaku +18]

[Capítulo 6] • Usado

Menma abrió la puerta y se asombro de verla ahí pero...

Más se asombro de haberla golpeado al abrir

—¡Sakura!— gritó y curó su nariz

La oji-jade lo vió tímidamente —Lo siento— soltó sin contexto

—Sakura...— soltó asombrado —Pero yo te golpeé—

El oji-azul y la oji-jade se vieron incómodos, él terminó de curarla y se quedaron callados

—¡Kushina y yo vamos a ir a pasear un rato!— exclamó Minato tomando a la curiosa peli-roja de la cintura

—Es noche...— soltó su hijo con un mal gesto

—Las estrellas se ven hermosas, tu nos dijiste que por eso te gusta trabajar de noche— respondió con una de sus sonrisas

Su padre era muy inteligente, usaba sus propias palabras en su contra

—Kushina-san...— llamó la peli-rosa

—Lo siento Sakura-chan, tengo que irme regreso en una hora— dijo siendo obligada por su esposo

La puerta se cerró

—¿Estás conciente que lo hicieron para que nosotros quedarnos solos?— preguntó a la Hokage

—Realmente es muy convincente ese argumento de las estrellas, tú siempre te le quedas viendo— respondió tranquila

—Es porque es lo único que hace que no te vea todo el tiem...— soltó, cerró los ojos y sintió que se merecía un gran golpe

—Supongo— dijo de manera inocente —Después de todo tu deber es cuidarme...—

El Namikaze agradecía que ella fuera tan despistada

—Quiero hablar contigo, Menma— dijo seriamente y entró al cuarto del hombre

—¿Porqué en mi cuarto?— se preguntó cerrando la puerta

La oji-jade se sentó en la cama del oji-azul

—¿Porqué tienes el cabello mojado?— cuestionó —O... olvídalo seguro tomaste una ducha antes de venir—

—No— negó —Tu mamá nos baño a Sasuke y a mí— rápidamente dijo

—¿Sasuke? Entonces, ya te arreglaste con él, ¿No?— dijo con un poco de molestia

—Para nada— soltó con una sonrisa —Solo me encontró fuera de tu casa— expulsó con poca importancia

—Ya veo— soltó sin creer del todo la simpleza de la situación

—Quería disculparme, no debí de ofrecerte ser mi amante— dijo arrepentida —Creo que solo pensaba en mí—

—Yo acepté— añadió —No tienes nada de lo que arrepentirte, solo volvamos a la normalidad y ya— dijo levantándose de la cama

Sakura se acostó en la cama, no quería salir —¿Recuerdas cuando hacíamos pijamadas?— cuestionó mirando a la pared

El Namikaze se sentó de nuevo, —Eso fue hace décadas— siguió la conversación

—Tú siempre me cuidaste de mis pesadillas...y cuando pensaba en mis padres—

El de rayas en las mejillas, miró el techo, siempre la cuidaba, ella cuidó de él, le era difícil no sentir nada por ella, hasta la amistad le sabía a poco

—No te pongas triste— dijo acostándose a su lado —Ahora estás viviendo tu sueño...eso es lo único que deberías pensar, Sakura—

La de piel blanca se acercó a él, lo tomó de una mejilla y lo besó cerca de está