Niebla Verde

Segundo Capítulo

Esa noche me costo mucho dormir pensando en todo lo que iba a perder al mudarme aunque también había que pensar que a lo mejor allí se estaba bien, pero me negaba a pensarlo y admitirlo.

Al día siguiente me despedí de Noelia con muchas risas y lagrimas me daba mucha pena tener que dajarla pero de todas formas íbamos a poder comunicarnos por todos las redes sociales. Partimos camino al aeropuerto temprano para poder llegar alli por la tarde.

El viaje se me hizo muy corto debido a que me dormí y cuando me desperté ya estábamos aterrizando. Habia un taxi esperandonos que nos llevo al pueblo. Este sitio era todo lo contrario a Chicago, tenia un aspecto antiguo como si fuera de la edad antigua, se parecÍa mucho a una aldea.

No habia ni un solo piso todo eran casas de dos plantas pintadas de color blanco alrededor del puebecillo( que por cierto no tendria mas de medio kilometro de largo ) habia un espeso y frondoso bosque por el que solo se podia entrar por una carretera que ha juzgar por el cartel que habia al lado conducia hacia mi nuevo instituto.

Nos paramos en una casa como otra cualquiera bastante mas pequeña que la de chicago, no llevabamos alli ni una hora y ya lo hechaba de menos.

Entramos en la casa, tenia un aspecto muy pintoresco, las paredes estaban pintadas de blanco como la fachada de la casa y tenian cuadros colgados en ellas. Entre en el que seria mi nuevo cuerto, lo observe, suspire y solte todas las cosas en la cama, que la verdad no sabia porque tenia, total iba a pasarme todo el año en un instituto ¿no?

Despues de guardar todas mis cosas en los cajones empeze a buscar un enchufe para poner a cargar mi movil y me di cuenta de que ¡solo había tres enchufes en toda la casa! Tendria que pelearme con mis padres por uno siempre que quisiera cargar el movil, el portatil o la tablet...

Otra cosa en la que me fije es en que no habia television, sinceramente no se como se puede vivir con tres enchufes y sin television pero como ya e dicho antes iba a pasarme todo el año en el internado.

En el fin de semana no hice practicamente nada, lo pase encerrada en mi cuarto hablando por skype con Noelia, la echaba mucho de menos.

El sabado por la mañana me decidí a dar un paseo por el pueblo para verlo entero e ir conociendome un poco mas mi nuevo pueblo, en tan solo 15 minutos ya habia lo había rodeado por el limite entre el bosque y el pueblo 2 veces, desde luego su madre tenia razón, era un pueblecillo muy acogedor.

Llegó el domingo por la noche, y me puse ha hacer la maleta, de nuevo, y a empacar todas mis cosas. Me acoste muy temprano porque en este pueblo por lo visto las clases empiezan a las 7 de la mañana. Me dormí.