Part 3.-

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Louis cruzó la puerta de la calle y fue directo a la pequeña biblioteca situada frente al vestíbulo principal. Su tío estaba sentado allí ante el escritorio, rodeado de estanterías empotradas. Alzó los ojos sorprendido.

-Tío Bracken, ¿quién era mi madre? ¿Cómo murieron mis padres?

Todo lo soltó de una sola vez. Y luego Louis quiso decir: "dime la verdad", pero en su lugar se oyó decir en tono frenético:

-Dime que no es cierto. No es posible, ¿verdad? Tío, estoy muy asustado.

Su tío lo contempló fijamente por un momento. Había sorpresa y preocupación en su rostro. Luego inclinó la cabeza y cerró los ojos.

*

-Pero, ¿Cómo es posible?.-musitó Louis.-¿Cómo estoy yo aquí?

Habían pasado horas y el amanecer podía verse desde la ventana. Estaba sentado en el suelo, con la espalda apoyada en una esquina, donde se había dejado caer, mirando fijamente a lo lejos.

-¿Te refieres a cómo puede un mestizo de vampiro y humano existir? No lo sé. Tus padres jamás lo supieron. Jamás esperaron tener hijos.- el tío Bracken se pasó las manos por su cabello, con la cabeza gacha.- Ni siquiera se dieron cuenta de que podrías vivir como un vampiro. Tu padre te trajo a mi porque se moría y yo era la única persona en la que podía confiar. Sabía que no te entregaría.

-A lo mejor deberías haberlo hecho.- susurró Louis.

Tío Bracken siguió hablando como si no lo hubiera oído.

-Vivías sin sangre por entonces. Parecías un niño humano. No sé que me impulsó a tratar de averiguar si podías aprender a alimentarte. Te traje un conejo y lo mordí por ti y te dejé oler la sangre.- emitió una ligera risa al recordarlo.- Y tus dientecitos se afilaron al momento y supiste qué hacer. Fue entonces cuando supe que era un verdadero vampiro.

-Pero no lo soy.- protestó él.- Ni siquiera soy un miembro del Night World. Soy chusma.

El tío Bracken dejó de sostener su cabello y lo miró, sus ojos, generalmente del mismo azul que los de Louis ardían con una llama aunténtica plateada.

-Tu madre era una mujer buena.- dijo en tono áspero.- Tu padre renunció a todo para que pudieran estar juntos. Ella no era chusma.

Louis desvió la mirada, pero no se sentía arrepentido de lo que había dicho. Estaba atontado. No sentía nada salvo un vacío enorme en su interior, que se expandía en todas direcciones.

Y eso estaba bien, porque no quería volver a sentir nada. Todo lo que había sentido en su vida, todo lo que podía recordar, había sido una mentira. No era un cazador, un depredador que cumplía con su cometido en el esquema de las cosas al dar caza a las presas. Era un asesino, un monstruo.

-No puedo seguir aquí.- dijo.

El hombre se quedó perplejo.

-¿A donde irás? 

-No lo sé.

Soltó aire y habló despacio y con tristeza.

-Tengo una idea

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ruego que perdonéis la tardanza de verdad, ya no sé ni si aún queda gente con esta historia en su biblioteca pero bueno jajajajaja

Espero que os guste

Cazador.-Larry StylinsonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora