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─────────────➤ME REMOVÍ con incomodidad, de a poco abrí los ojos. Mi cabeza estaba recargada en la ventana, volví a cerrar los ojos ante el dolor horrible que se me presento.
— Despertaste — la voz de Clary hizo que la mirara de reojo, ella venía manejando.
Me enderece en el asiento, por el retrovisor pude ver a los otros tres Shadowhunters en los asientos de atrás, Jace e Izzy me miraban con preocupación, Alec ni siquiera me dirigía la mirada. Clarissa pareció notar mi confusión así que hablo.
— Alec y Jace te encontraron con el cuello roto, creí que estabas muerta.
— Lo estaba, ¿A dónde vamos? — gruñí, el dolor de cabeza me mataba.
— De vuelta al Instituto.—respondió brevemente, Alec —. Así que te agradecería que te quedaras callada.
— Me calla mi madre, no los perros de la calle. — Le respondí con brusquedad.
— ¡Oh! ¿Quieres hablar de perros? por que para eso hablemos de ti, mejor.— Iba a contestar, pero Jace se adelanto.
— ¿Pueden dejar de pelear? Sus voces me están irritando.
Nos quedamos en completo silencio, todo el camino nadie dijo nada. Al llegar al Instituto, Alec fue el primero en bajar, seguido de mí; al entrar todo volvió a sumergirse en un silencio. Los shadowhunters se quedaron inmóviles.
La persona, encargada de cuidar a Rory apareció, sin notar nuestra presencia.
— ¿La encontraron? — cuestiono el moreno, a nadie en particular.
— Raj... — llamo un shadowhunter.
— Raj nada ¿Encontraron a la mocosa? si Blair y Jace llegan, y se enteran que perdí a Rory me mataran. — Esas simples palabras hicieron que mi enojo saliera a flote.
— ¡¿Perdiste a mi hija?! — grite, provocando que este saltara en su lugar.
— ¡¿Perdiste a Jacinta?! — esta vez el grito fue de Jace.
— Yo-yo no la perdí como tal — ,comenzó a ponerse nervioso. — estamos jugando a las escondidas.
