El Camino del Loto Dorado

Capítulo 3 : Maestro Borracho

Wei Ying se recostó contra la cabecera de la cama, con las almohadas mullidas detrás de él, con su lista de reproducción de los primeros años de la década de los ochenta sonando en sus auriculares mientras el resto de la casa dormía tranquilamente durante la noche. Se acercó las rodillas al pecho y apoyó contra ellas Un preadolescente independiente.

Nunca le habían gustado los libros de paternidad, ya que era de la opinión de que no había ninguna "forma correcta" de educar a un niño. Las personas buenas y malas provenían de todo tipo de crianza -- de hecho, se reconfortó con esto, permitiéndose la seguridad de que a-Ling tenía los genes de jiejie y que, con suerte, superaría cualquier tipo de daño que él y Jiang Cheng pudieran infligirle involuntariamente.

Dicho esto, también pensó que si este libro era lo suficientemente bueno para Lan Zhan, y tenía alguna mano en la crianza de niños como Lan Yuan y a-Qing, entonces tal vez valía la pena intentarlo. Tal vez no pudiera controlar el tipo de adulto que sería Jin Ling, pero eso no significaba que no pudiera al menos minimizar el daño.

Abrió el libro, leyendo por encima el índice, y sus ojos se fijaron en un capítulo en particular, resaltado con un rotulador amarillo. Ayudar a su preadolescente a navegar por la pérdida. Curioso, Wei Ying avanzó, saltando varios capítulos.

El libro tenía muchas anotaciones, escritas muy cuidadosamente a mano. Wei Ying se sorprendió un poco al ver que Lan Zhan era el tipo de persona que escribía en los márgenes -- lo había catalogado más como un tipo de cuaderno y anotaciones --, pero luego se dio cuenta de que probablemente eso sería demasiado derrochador para Lan Zhan. Un uso excesivo de papel, o algo así. Sea como fuere, se encontró buscando con avidez las notas, leyéndolas con mucho más interés que el propio libro.

Era como seguir un mapa del tesoro hacia la vida interior secreta de Lan Zhan. A lo largo de las páginas, Wei Ying recogía bocados de él con su prolija letra: Establecer el tiempo para compartir los sentimientos, había escrito junto a un párrafo sobre los niños que responden bien a la estructura.

No lo sujetes con demasiada fuerza junto a otro sobre permitir a los niños el espacio para tomar sus propias decisiones.

Anímalo a hacer amigos, escribió tímidamente en los márgenes junto a un apartado sobre la soledad.

Su sencillez resonaba, como un golpe de mazo contra un lugar hueco en su interior. Wei Ying se encontró trazando las palabras con el dedo, como si pudiera tocar al hombre que había detrás de ellas y ofrecerle algún consuelo para el frágil malestar que percibía allí.

"Los niños miran a los adultos en su vida para entender cómo actuar y dar sentido al mundo. No te encierres en ti mismo. Permita que el niño vea lo que usted siente. Hágale comprender que no está solo en su dolor. Expresar tus sentimientos abiertamente permitirá que tu hijo se sienta cómodo abriéndose a ti. Esta apertura le dará a su hijo el espacio para explorar y comprender mejor sus sentimientos, y lo ayudará a desarrollar habilidades de afrontamiento saludables que le servirán en el futuro."

En el margen de este pasaje, Lan Zhan había escrito una palabra: Padre.

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Jin Ling no podía comer. Su plato de verduras jugosas se estaba coagulando frente a él mientras se retorcía de impaciencia. El tío Wei hablaba más que comía -- claro que sí, siempre estaba hablando. El tío Jiang no era mejor, y se dejaba distraer por el tío Wei. A este ritmo, Jin Ling nunca podría levantarse. Se quedarían sentados en la estúpida mesa para siempre y se perderían todo el viaje.

No podía soportarlo más. "¡Deja de hablar! Vamos a llegar tarde!"

Las palabras salieron de su boca, y sus dos tíos se volvieron para mirarlo con sorpresa. Era casi como si hubieran olvidado por completo qué día era.