¿Eres tú?

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Estaba impaciente, oh, si que lo estaba, llevaba una semana investigando todo lo que podía y estaba a su alcance, idas a la biblioteca, páginas web, platicas agotadoras con su amiga de cabello castaño, estaba realmente exhausto, pero todo tiene su recompensa, sabía que era él.

Solo lo había visto una sola vez, se parecía tanto a su Kachan, oh cielos, en verdad que lo extrañaba, juraría que así sería el rostro de su Kacchan cuando estuviera más grande, odió el momento de su encuentro, él no se encontraba de la mejor forma, en su cama, semidesnudo y con una parálisis, juraría que sin ella jamás lo hubiera podido ver.
...

-Te juro Ochako, se parecía tanto a él, sino fuera por qué él ya no está conmigo te diría que era absolutamente él- alegaba un pecoso

-Izu, realmente nunca conocí a tu novio, se que es duro para ti, llevas 7 años desde su perdida¹ , pero tienes que superarlo, no todo da vueltas alrededor de él, estás tan enfocado en Katsuki que ya hasta en tus sueños aparece

-No Ochako, no fue un sueño, investigue en la biblioteca, era tan real, busque casos similares, dado a los datos que rejunte se trata de un "íncubo", mira- dijo mostrando un libro que pidió prestado en la biblioteca- aquí dice que Un íncubo es un demonio que causa una parálisis de sueño, mucha gente los llega a ver, otras no, se aprovechan de ti sexualmente mientras que tú estás en la parálisis, en algunos casos estos llegan a hablar, tienen cierto poder, en muy pocos casos dejan que su víctima pueda hablar y moverse, esto lo hacen para escucharlos disfrutar de su toque, solo el 0.3% de los casos los íncubo llegan unos días antes de su misión para avisar que estarán de regreso², y por lo visto yo participe en ese pequeño porcentaje.

-Izu, ¿Estás seguro que esa información es correcta?, No quiero ir al rato a pedir un cura para hacerte un exorcismo

-Seguro Ochako- estaba realmente seguro

...

Y ahí se encontraba...

Había pasado alrededor de una semana y no lo había vuelto a ver, estaba empezando a perder la esperanza, talvez solo fue una ilusión ya que últimamente había estado pensando en Kacchan.

Cómo siempre hizo su rutina, terminar de hacer el aseo de la casa, darse un baño y ponerse su pijama favorita, está, últimamente era de un héroe de comic 'All Might', ya no tenía esperanza, tenía el presentimiento de que esta noche sería igual que las anteriores, sin señal alguna del demonio dueño de su parálisis de aquella noche, estaba comenzando a caer en los brazos de Morfeo, solo tuve que caminar un poco desde la cocina hasta su recamara y disponerse a dormir, estaba más que agotado.

Un movimiento lo despertó, sentía su cama hundirse, se despertó, vio hacia el techo de su cuarto, la luz de la ventana le indicaba que eran las 3 de la mañana aproximadamente, entonces, lo sintió, no podía moverse, sintió el miedo recorrer por su columna, solo podía mover su mirada, ni siquiera podía hablar o siquiera mover su boca.

Y lo vió...

Lo vió a él...

Aquel ser responsable de sus preocupaciones...

Ese que se parecía tanto a su novio...

Al amor de su vida...

Ahí se encontraba en su cama, y el estaba inmóvil...
Le daba una mirada cargada de lujuria, aquella que vio en escasas ocasiones a su novio, estaba semidesnudo, su cuerpo solo lo cubría una túnica, y está era transparente, no llevaba ropa interior, eso lo hacía ver condenadamente atractivo.

Mi íncuboDonde viven las historias. Descúbrelo ahora