Sunghoon logró calmarse, sin embargo, el que ahora estaba alterado y con ganas de llorar era otro. En ningún momento planeó mostrarse ese mismo día, incluso prefirió lidiar con Yeji antes que arriesgarse a decepcionar a Sunghoon. Pero ahora se encontraban en esta situación.
Sunghoon descansaba en su hombro aún regulando su respiración mientras ignoraba la tormenta mental de su almohada y Heeseung se sentía en el cielo abrazando su cuerpo frío como el hielo debajo de ellos y en el infierno queriendo huir de un destino inevitable.
- Perdón... No quería que nos encontráramos así...
- N-no, no... Está bien. Yo soy feliz haciéndote feliz.
Tartamudeó un poco, perfectamente pudo ser del frío pero estaba seguro que eran sus nervios traicionándolo.
- Entonces... Yo... No sé... ¿Debería pedirte perdón? Estaba convencido de que eras una chica...
- No, que va. Siempre usé un lenguaje muy... unisex, para que no sospecharas que era hombre. Supongo que es lo mismo que darte a entender que no lo soy.
La conversación era desesperantemente incómoda y eso a Heeseung lo estaba matando. No podía leer a Sunghoon con tanta presión.
- Y... ¿Cómo te llamas?
¡Ah, cierto, que no se conocían en persona! Casi olvida que lo estuvo siguiendo como un fan a una celebridad.
- Lee Heeseung. Un placer, Park Sunghoon.
- Oye, Lee Heeseung...
- Dime
- Yo también te amo.
Salieron del lugar de la mano rumbo a una cafetería cercana que Heeseung no conocía de nada. Ellos tenían mucho de que hablar...
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- Hey, el papel reciclado. Dijiste que si sabía lo que significaba. ¿Por qué era?
- Si terminas una hoja de papel, normalmente la desecharías, pero el papel reciclado es papel desechado que no se rinde y permite que se reescriba una historia sobre él. Quiero mi historia en papel reciclado porque es símbolo de fuerza, grita "¡No te rindas, puedes intentarlo las veces que haga falta hasta que salga!". Este es nuestro nuevo comienzo, nada será igual, empezando por Ni-Ki, pero no te olvides de tu pasado porque es parte de tu nueva historia.
Sunghoon saludó a la camarera con un movimiento de cabeza y le hizo una señal con la mano, tomando asiento junto a Heeseung en una mesa de la terraza para conversar largo y tendido como dos amigos cercanos y no como dos completos desconocidos.
