*Hoy, la pared del termo iba a fallar y finalmente estaría libre. Mientras continuaba llorando en la pared cada vez más delgada del contenedor de metal, sus ojos rojos y brillantes ardían con determinación. Una semana? Meses? solo los que estaban fuera de este infierno sabían realmente cuánto tiempo había estado atrapado aquí. El hecho de que su yo débil y mitad humano lo hubiera golpeado y forzado a entrar en el termo Fenton y, conociendo a Clockwork, había salvado a su familia de la inminente explosión, enfureció al fantasma. Lo primero que iba a hacer cuando saliera de este maldito termo era golpear a Clockwork en su cara engreída, al menos eso intentaría hacer antes de que ese fantasma entrometido hiciera una pausa en el tiempo y lo borrara del tiempo mismo. El solo hecho de pensar en toda su situación con su yo más joven le hizo hundir más los puños en el acero. Por supuesto, siempre se decía a sí mismo cada vez que comenzaba a golpear las paredes del contenedor que sería esta vez cuando saldría y representaría su venganza. Siempre que no estuviera descargando su ira interminable contra el acero que lo rodeaba, se estaría imaginando a sí mismo destruyendo su versión más joven y malcriada y el fantasma que controla el tiempo. Aún así, se imaginó la cara de Clockwork frente a la profunda abolladura. Con cada pensamiento venía un puñetazo.*
Dan:Ese tonto y estúpido pedazo de mierda.
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*Riiipppp.*
*Dan Phantom ignoró el hecho de que estaba vergonzosamente tirado en el suelo a favor de saborear el nuevo espacio abierto a su alrededor. Rápidamente se quitó la capa monocromática de la cara. Aunque los engranajes y los relojes flotantes le recordaron que estaba en la casa del fantasma entrometido, era mejor que mirar el gris apenas visible del termo Fenton. Dan se levantó rápidamente del suelo y encendió sus puños con ectoplasma verde, pero lo único que escuchó a su alrededor fue el tic-tac de los interminables relojes flotantes. Había esperado que Clockwork apareciera detrás de él en cualquier momento, hiciera una pausa y dijera un jab sarcástico antes de desear que desapareciera, pero ... nada.*
Dan:Clockwork! Sé que estás aquí!
*Gruñó el fantasma Sus guantes negros chirriaron con la fuerza con la que apretó las manos. En el piso de abajo estaba el termo roto, un enorme agujero por el que Dan había salido a puñetazos. Metió el pie en el recipiente y lo partió en dos. El fantasma dio otros pasos antes de salir volando de la habitación a través de uno de los muchos pasillos. En el laberinto de la torre del reloj, Dan voló con cuidado, buscando al otro fantasma o una salida. Portales verdes y remolinos a diferentes líneas de tiempo pasaban a su lado a medida que entraba o salía de la torre. Resultó que se dirigía más hacia la torre cuando llegó a una habitación central, con una gran pantalla brillante enmarcada con engranajes en el medio de la habitación. Dan resopló mientras aterrizaba en el suelo frente al portal. Al menos si Clockwork iba a intentar borrarlo, Dan posiblemente podría escapar a cualquier línea de tiempo que estuviera a través de la pantalla. Pero cuando aterrizó, la pantalla parpadeó de un remolino verde a una escena en movimiento. Una ciudad moderna con gente y coches llenándola. Pero a medida que miró más tiempo, Dan pudo ver algunas cosas extrañas que se destacaron. Algunas personas eran normales, pero la mayoría tenía algunas características extrañas. Los de piel azul, pelaje, cuernos caminaban por las calles sin preocuparse por nada del mundo. Los padres que llevaban a sus hijos con alas y garras se dirigían a la escuela. Incluso entonces, por encima de la gente "común", los disfrazados corrían por las carreteras. Al igual que los de los cómics, varios superhéroes vestidos con spandex salpicaban la escena, como si estuvieran listos para enfrentarse a pequeños delitos y accidentes. Dan se acercó y entrecerró los ojos mientras trataba de entender lo que estaba pasando en la pantalla, con la nariz casi tocándola.*