De un momento a otro muero, luego reencarno en otro mundo y al final le vendo mi alma a un dios aburrido sin darme cuenta, cuán tan mala tiene que ser mi suerte
En la torre de Reloj que esta ubicado en el continente de Europa, en la oficina del Mago Marshall.
Kischur Zelretch Schweinorg, Mago de la segunda magia y creados de los CaleidoSticks.
Muchos sucesos en la vida del vampiro, quien disfruta de muchas cosas en su vida, como hacerles bromas a las demás personas.
Sentando en su escritorio, mirando a su aprendiz, hija de su mejor amigo que siempre le da los mejores entretenimientos.
Aun recuerda cuando lo mando a serena, un mundo donde la población masculina es meno de 100 hombres y lo demás es de mujeres.
El como huyo por días fue divertido, excepto por la parte donde lo violaron.
Incluso sintio lastima, bueno casi.
Fue opacada por la risas que tenia, el como se desarrollo, escapo de los que lo perseguían, pero entro a una casa que no debía y lo atraparon en ese lujar al pobre.
"Y bien, no tengo todo el día" dijo una mujer de cabello castaño peinado en una cola de caballo, con una camisa manga larga de color blanco, pantalones rojos y botas de color café que le llega a las rodillas. "¿Para que me llamaste?"
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El hombre de edad no dijo nada por unos momentos, solo sonrió "Si vistes a mi nueva estudiante" dijo el mientras volteaba hacia la ventana y veía a una niña de pelo blanco con un Ahoge del mismo color y ojos de color verde esmeralda
"Claro que si" dijo ella "Como rayos no lo sabría, Lord El-Medoi II me dije que se puede teletransportar"
Y en medida es cierto.
Zelretch le dio un libro y le explico como poder teletransportarse, la ayudo a hacer el circulo para que le fuera mas fácil.
Pero despues de unas semanas lo domino, cosa que desconcertó a ella de gran manera, ya que por su origen dual no podría dominar algún hechizo pero lo logro.
Con una extraña facilidad.
"Que pasaría si te dijera que es tu hija de otra realidad" dijo el hombre con una cara seria.
"Puf, jajjajjajajjajajjajajj" ella se río "Que buen chiste, cuéntame otro" dijo mientras se ponía su mano en su estomago, siendo que le empezó a doler.
"Lo dijo en serio Barthomeloi" la seriedad nunca abandono la cara de Zelretch
Y la señorita Lorelei al ver la extraña seriedad del viejo vampiro, la cual solo tiene en momentos sumamente serios.
"¿Enserio?" dijo ella sin creerlo.
Ella tiene estándares altos y no pensó ver a un hombre que los cumpliera, aunque bueno.
En dicho estándares debe de usar una magia verdadera por lo que tardaría en encontrarlo, pero ahora se entera que en otro mundo, realidad o como le quieras llamar encontró a uno y tubo una hija que no se parece nada a ella.
El hombre de cabello y barba blanca se levanto de su silla, camino hacia la ventana y la abrio.
"Anna ven aquí" dijo el hombre.
Al escuchar su nombre la niña volteo a ver al hombre, debajo de ella un circulo con runas antiguas en los bordes, en medio del circulo tres engranajes y de manera rápida se teletransporto hacia la oficina del Mago de la segunda Magia.
"Si tío Zelretch" dijo la niña, sabiendo que no le responderá o la escuchara si no le dice tío.
"Te presento a Lorelei Barthomeloi" dijo el hombre señalando a la mujer de pelo castaño que mirada a la niña de pies a cabeza.
Se quito un guante de su mano quedando desnuda y la puso encima del hombre expuesto de la niña.
Dejo fluir su prana hacia el cuerpo de la niña revelando los Circuitos Mágicos, aplico un poco mas y supo la cantidad y calidad.
"No esperaba nada menos" dijo ella "Es natural, si fuera mi hija tuviera un potencial mejor que el mío, 150 y una calidad que no habia visto antes" dejo de tocar el hombro de la niña y se puso de nuevo su guante.
"No entiendo pero gracias, supongo" se alejo un poco de la mujer que la habia tocado.
"Eso era todo, ahora si me disculpas" dijo el hombre mientras empujaba a una lorelei enojada hacia la puerta "Tengo que preparar el viaje de mi pequeña sobrina para que vea a su compañeras estudiantes"
"Ella parece algo molesta" dijo Diamond mientras salía del cabello de Anna.
"Yo tambien creo eso" se sentó en el sillón que esta pegada a la ventana "Por alguna razón me veía raro"
"Teniendo en cuanta que estaba hablando con el Gran Maestro no me sorprendería que le halla mostrado algo que la molesto"
"¿Ya lo habia hecho?
"Mas de una vez" dijo el Caleido "El mas traumado en Waver"
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Irisviel Von Einzbern sintio un cambio en la fuerza.
Cuando estuvo de viaje con su esposo, Emiya Kiritsugu.
Pero no le llamo la atención, aunque por su instinto sabe que tiene que ver con su hijo adoptivo, por lo que llamo de inmediato a su casa solo para descubrir que no habia pasado nada.
Incluso pregunto si ya tenia novia pero no.
Talvez tendría que tomar cartas en el asunto, pero seria cuando ella estuviera de vuelta, bueno eso seria en el pasado.
Ahora esta enfrente de una versión bronceada de su propia hija, y si hija a lado de ella.
Sella, la doncella estricta que cuidad a sus hijos y Liz, la hermana menor de Sella que no hace nada excepto comer.
Pero aun asi la quiere.
Regresando al punto.
"Cloe, no es bueno querer matar a tu hermana solo por que no te gusta" dijo la mujer de pelo blanco largo con los ojos de color rojo que viste un vestido de color blanco, detrás de ella una Sella viendo la escena y un Shirou sin saber que sucede.
"No lo entiendes, estuve encerrada dentro de ella por años, viviendo una vida que me tenia que vivir yo" dijo la versión bronceada de Illia.
"Se que no hice nada, hasta intente llevarme bien contigo pero"
"No te disculpes Illia-San, ella empezó todo esto intentándote matar" dijo una pequeña estrella amarilla en un anillo que tiene dos pequeñas cuenta roja con seis alas blancas "Pero una chica mágica no tiene rencores" dijo el palo en conflicto.
Caminando por las calles de fuyuki una niña de pelo blanco que le llega por debajo de los hombros, con una camisa manga larga de color blanco, una falsa azul, medias negras y botas de color café jalando una maleta negra, la cual solo tiene ropa.
Se detuvo enfrente de un portón negro.
"¡Tu!"
Escucho una voz detrás de ella.
Ella volteo y vio a una mujer de pelo blanco que le recuerda a Illia pero mayor.
Detrás de ella salió una niña de la misma apariencia que la mujer y detrás de la niña se asomo una versión de la niña pero bronceada.
Ella volteo hacia los dos lados y despues se señalo a si misma "¿Yo?"
"Si tu, ven" dijo la mujer, aunque en realidad la jalo hacia adentro de su casa.
