No había nada.No veía absolutamente nada.Estuve un buen rato retorciéndome en lo que parecía un suelo mientras no podía mover las manos.Definitivamente estaba atada.
–¡Ayuda!–exclamé.
Oí unas voces y derrepente me soltaron las manos y los ojos.
Había una guardia.
Rápidamente pegué un brinco , estaba en una habitación bastante lujosa.Cogí un peine que está en una mesita y rápidamente se la lancé en la cara a esa guadiana.
–Seras hija de puta cabrona de mierda te voy a....–le lancé un espejo.
–TE VOY A MATAR –Intentó atraparme pero yo seguía corriendo por toda la habitación.
–¡Quién demonios eres psicópata!–dije alterada.
–¿¡Yo psicópata!? Soy Candelarius , y perdona que te diga bonita, tu me estás lanzando cosas.
–Cande...larius?–Y ahí tuve otro deja vú.
–¡No te metas en mi vida privada!–espeté y me dirigí hacia la puerta para irme pero la chica me tocó el hombro.
–Candela.
–¿Candela?
–Me llamo.
Meneé levemente la cabeza , estás visiones...parecen de otro mundo.
–Candelarius , siento que te conozco.
–¿Sientes? Ese peine que me has lanzado me ha conocido más las cara que nadie –espetó enfadada.
–No, no es eso , es como...si te conociera de otra vida.
–No digas tonterías y ahora levántate para que pueda llevarte con mi domus.
–¿Tu domus?
En un momento está ya Candelarius guiándome hasta dónde está su señor.Toda la casa era hermosa , era de mármol con detalles dorados que te podías reflejar en él.Cuando por fin llegamos Candelarius está por irse cuando la paré.
–¿Te vas a ir?–pregunté algo nerviosa.
–Si, tengo vida social niñita.
–T/n venit!–exlamó una voz detrás de una puerta.
Al pasar estaba en una habitación impecables con todo tipos de lujos.
–Hola– dijo y ahí lo miré.
–Lo era , pero ya no T/n, cambié por tí amor, es amorem meae vitae.
–Mmmm...
–¿Me odias ? UwU
–Ya no– contesté sonriendo y le besé.
–¿Torres?
Y ahí supe que no era solo un desconocido.