Detestable Amor

Capítulo 4

Abro los ojos y lo primero que veo es el pie de Jason en mi cara.
Al parecer está dormido, me pregunto que hora será.

Aparto el pie de Jason sin cuidado alguno y me dirijo al baño.
Una vez fuera, voy a por mi móvil y veo la hora. ¡Las 12 del medio día! He dormido tan solo 7 horas. Se me ocurre despertar con mucho cuidado a Laur para hacerle una broma a Jason, ya veré que se me ocurre.

-¿Qué quieres? -me dice Laur aún con los ojos cerrados.

-Que te despiertes, son las 4 de la tarde -miento.

-¡¿Qué?! -chilla muy fuerte mientras se sienta en la cama,

Laur no suele despertar a éstas horas, dice que le saldrán bolsas en los ojos, lo cual me causa gracia.

Jason abre los ojos de par en par.

-¿Qué pasa? -pregunta.

¡Vuelve a dormir Jason Ward!

-¡Me saldrán bolsas en los ojos! -chilla Laur.

¡Por Dios!

-Vaya, gracias Lauren Smith, has arruinado mis planes -le reprendo. Quería hacerle una broma a Jason. La próxima vez, le hago una broma a ella.

-¿Qué planes? -pregunta algo confusa.

-Ya nada -digo mientras me levanto a por mi móvil. Me giro y veo a Laur con un espejo rosa en las manos, observando sus ojos.

Jason acaba de abrir el tarro de mantequilla de maní otra vez.

-Ah y por cierto, son las 12 del medio día -digo mientras les tomo una foto.

Suelto una carcajada mientras ellos corren hacía mi para quitarme el móvil.

-¡Esperen! -chillo entre carcajadas- ¡Miremos la foto antes de que me hagan borrarla!

Me sueltan pero al instante me cogen en brazos y me lanzan a la cama.

-Veamos -dice Jason y me lanza una mirada de esas que matan. (No de belleza, sino de miedo)

Observando mi iPhone, suelto una carcajada. Laur y Jason se ven tan ridículos. Laur con una mano en su parpado izquierdo y en la otra un pequeño espejo rosa mientras mira a la cámara, luce asustada y aliviada al ver que no tiene bolsas en los ojos, Jason con el tarro de mantequilla de maní en una mano y un dedo en la boca mientras lo lame, parece disfrutar de su dedo cubierto de maní.

Me parto en risa mientras ellos se lanzan a mi y tratan de quitarme el móvil. Le pico a un boton y al instante mí móvil se encuentra bloqueado. Necesitan mi clave para lograr borrar la foto.

-¡Mitchell Herondale! ¡¿Cuál es tu código?! -grita Laur mientras trata de descubrirla apretando todos los números a la vez.

Uy, ya se enojó.

-¡Mitchell! -ladra Jason.

-Hmmm -digo y pongo cara de niña buena.

Narra Ander.

Hace media hora que debía estar en el gimnasio con Harvey como hemos quedado, pero se me ha hecho tarde ya que Mariana me llamó por teléfono y no he tenido la oportunidad de cortarle la plática para poder arreglarme.

-¿Porqué tan tarde? ¿Así es cómo tratas a tu querido amigo? -exclama Harvey cuando me ve.

-Lo siento, Mariana me ha llamado y no encontraba la manera de decirle que tenía unos asuntos pendientes -digo y me encogo de hombros- pero en fin, ya estoy aquí. ¿Extrañaste a éste chico sexy que tienes frente a ti? -me señalo y ríe.