Tal como su nombre lo indica, cortitos Stony sin relación alguna entre ellos. En serio, son muy cortitos. Los escritos están inspirados en cualquier cosa que me encuentro por las redes sociales (especialmente TikTok), y alguno que otro lo saco de mi...
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El sonido de la puerta abriéndose me hace levantar mi vista del lienzo y detener los movimientos del pincel sobre éste. Como siempre, he llegado una hora antes al aula para preparar todo antes de impartir mi clase particular de pintura. Dirijo mi vista hacia la puerta que acaba de abrirse, observando cómo mi alumno estrella cruza el marco con una sonrisa radiante, siendo el primero en llegar (como cada día). Peter, un pequeño de apenas ocho añitos, no sólo es el más pequeño de mi clase y el más talentoso, sino que también es hijo único del hombre que me sonrió desde el pasillo antes de despedirse del castañito con un beso en la mejilla y dar media vuelta para retirarse.
—Buenos días, profesor —me saluda Peter al tiempo que camina a su asiento, aunque yo no le presto mucha atención.
—Buenos días, Peter —contestó de manera automática.
Siempre es la misma historia cada que mi alumno estrella llega al salón: mi completa atención es robada por su sensual y apuesto padre que se pierde por el pasillo, contorneando sus caderas provocativamente a sabiendas que le estoy mirando. Y toda mi atención se la roba esas suculentas nalgas cubiertas por la tela del traje negro.
—¿Por qué esa sonrisa, profesor?
Mi rostro enrojece al saber que el niño me ha pillado mirando de forma descarada el trasero de su padre. Bueno, no tanto así. Es decir, dudo que sepa qué era lo que me estaba devorando con la vista. Pero sin duda ha notado la sonrisa depredadora que se instaló en mi rostro.
—Por nada, Peter.
Sé que tengo que hablar con él, pero es difícil. Siempre que veo su rostro, veo la viva imagen de Tony. Y es inevitable el recordar el rostro de ese hombre todo sudado, sonrojado, afectado por el placer. Su cuerpo desnudo debajo del mío, a mi completa merced, gimiendo mi nombre sin pudor y suplicándome que le dé más duro.
Pónganse en mí lugar: ¿Cómo le dices a tu alumno estrella, un niño de ocho años, que te estás cogiendo a su papi?
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La Bestia de Wolfind cada vez está más cerca de ser concluida, y mientras eso pasa, les quiero compartir estos pequeños escritos Stony que provienen principalmente de TikTok, pero algunos también salen de mi mente enferma jajaja.
Como podrán ver, son justo eso: cortitos. Espero que mínimo una sonrisa sí les saquen :3