Sweet Alpha¹

3

POV Mina

Curiosamente todo iba bien pero las chicas en todo el día me han mirado serías, hice algo mal?

Tal vez olvidé decirles hace unos días porque me fui con Somi.

Me van a matar...

Espero no morir, fue mala idea estar en un grupo de omegas pero no me arrepiento porque conocí a mis omegas.

para ser honesta siempre quise decirles a las chicas que era una alfa pero tal vez no me iban a creer solo porque no me comporto como una alfa 'común', yo soy mas como una omega.

Suspiré y me dedique a jugar con mi computadora.

A veces pensaba que yo debí nacer como una Omega y no como una alfa. Yo soy como una Omega, soy tierna, tímida, me da miedo la voz de mando de los alfas y soy sumisa.

Suspiré y seguí jugando Minecraft.

•••

Pov narrador

Mina estaba tranquilamente jugando Minecraft hasta que de repente abren la puerta de la habitación haciendo que Mina pausara un momento el juego para mirar a las chicas.

Estas estaba con una cara sería a excepción de Sana que sonreía.

Mina pensaba en lo peor, tal vez las chicas sabía que era alfa y todo se acabaría, que haría entonces?

Mina negó y suspiró profundamente para mirar de nuevo a las chicas.

—Pasa algo? —preguntó Mina haciendo que las chicas la mirarán.

—Porque hueles a alfa y porque estaba esto en el baño —mostró los supervisores y Mina se puso nerviosa, se había olvidado de ocultar su olor.

Mina se golpeó internamente por eso.

—Mina eres una alfa —preguntó Jihyo

Mina asintió nerviosa.

—Lo siento por no decirles antes, tenía miedo de que me sacarán del grupo —Susurró Mina apenada.

Las chica entendieron.

—Al menos yo ya sabía —dijo Sana orgullosa y Mina le sonrió.

Las chicas rodaron los ojos.

A la hora de la cena, las omegas estaban muy cariñosas con Mina, pronto llegaría el celo de las omegas y la alfa no sabía que hacer.

Les dio mimos a las chicas.

Después de la cena vieron una película y Mina se durmió a la mitad de la película.

Las chica sonreían.

Algunas durmieron el sofá en donde estaba la alfa y las demás en el suelo.

Mina le gusto estar con las omegas y solo esperaba que fueran sus omegas algún día.

Lo que la japonesa menor no sabía, era que sus sentimientos eran correspondidos.