Capitulo 1 - El Comienzo

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Hola soy Amelia Lambert, una niña de 14 años me dicen que soy una niña muy alegre y con una gran familia: mi madre Emily, Mi padre Owen, mi hermano Austin y doby nuestro perro nosotros somos la familia Lambert, mi familia es una familia trabajadora.

Mi familia vivía en Minessota era muy feliz, tenia amigos, buenas notas en la escuela, era muy hermoso vivir en Minessota hasta que nos mudamos a Amaurotam por el trabajo de mi padre, por suerte mi abuela vive en Amaurotam y nos cuenta maravillas del pueblo y de lo hermoso que es, tengo muchas ganas de visitar a mi abuela y conocer Amaurotam.

Mi ultimo día en Minnesota

Mi ultimo día en Minnesota traté de disfrutarlo lo máximo posible, me despedí de mis amigos y recorrí toda Minnesota para no extrañar esta hermosa ciudad, me voy triste porque ya tenia una vida aquí, amigos, en la escuela siempre fui muy popular y muchos lugares que extrañaré de esta hermosa ciudad, es algo muy duro para mí pero no puedo hacer nada al respecto es una decisión que no puedo cambiar.

En camino a Amaurotam

-Tomamos la carretera en camino a Amaurotam un viaje largo antes de tomar la carretera recargamos gas, compramos snacks y fuimos al baño.

Camino a Amaurotam pusimos canciones para relajarnos y jugamos al yo veo, nos comimos los snacks, Austin y yo dormimos porque estábamos cansados y seria un viaje muy largo, mi papá y mi mamá se turnaban para conducir.

¡Bienvenidos a Amaurotam!

¡Por fin! después de un camino bastante largo llegamos, la verdad es que me esperaba diferente el pueblo al parecer no es como lo contaba la abuela, probablemente con el tiempo se desgastó, puede ser que con el tiempo le agarre cariño pero nada que ver con mis expectativas.

Llegamos a la casa de la abuela y me quedé sorprendida al ver una casa enorme da mala espina, pero es una casa gigante, de madera y es vieja muy vieja.

Tiene un patio enorme y 3 pisos ¡vaya casa!.

La abuela Rose

La abuela nos recibió de un forma muy bonita, me dio mucho gusto verla de nuevo, nos dio un abrazo y un beso en la mejilla nos dio un tour por la casa y nos llevo a nuestras habitaciones.

Las habitaciones muy viejas, descuidadas y esa mala vibra, el closet da mucho miedo y las bases de las camas ni se diga.

La casa de la abuela

Terminando de comer recogimos nuestros platos y los lavamos, me puse a jugar con Austin y a conocer la casa, tiene unos pasillos profundos y estrechos dan mucho miedo.

Explorando la casa nos dimos cuenta que hay un sótano y un cobertizo en el patio, quisimos explorar el sótano pero la abuela nos llamo para enseñarnos su tocadiscos en la sala, nos puso las canciones y nos puso a bailar a todos, lamentablemente de la nada se descompuso y dejo de sonar.

La abuela nos conto la historia del pueblo, como se fundo y todo lo que ella sabe, nos conto que el abuelo mando a construir la casa y se dice que en esta casa hay un secreto y un tesoro escondido.

Después de todas las cosas que nos conto la abuela se nos hizo noche, cenamos y nos fuimos a dormir.

El día siguiente

La noche la pasamos un poco incomoda, confusa por las malas vibras que sentí.

Bajamos a desayunar, la abuela nos hizo waffles y tocino, un desayuno exquisito también estábamos emocionados porque sería el primer día de mi papá en su nuevo trabajo, aparte mi mamá nos llevaría de paseo por el pueblo para ver las escuelas y conocer.

La abuela se negó a ir dijo que limpiaría la casa, al final nos marchamos no la logramos convencer, en camino a recorrer el pueblo vimos tiendas de ropa, mini super y solo encontramos una escuela, mi mamá se bajo a preguntar acerca de las inscripciones para mi y mi hermano.

Nos bajamos del carro porque teníamos calor al bajarnos nos metimos a la escuela, es una escuela normal en lo que cabe pero no estoy cómoda en este pueblo tendré que adaptarme.

Al final como es la única escuela en el pueblo nos inscribieron, terminando las inscripciones fuimos a por los útiles y seguimos recorriendo Amaurotam.

Al final de nuestro recorrido compramos un helado y regresamos a la casa.

Llego la noche y nuestro padre llego de su trabajo, la abuela no sabemos como pero limpio toda la casa pareciera que hizo un pacto o algo porque es una casa gigante, la abuela nos hizo de cenar un fabuloso pavo a la naranja.

Otro día más en este pueblo llegó la noche y sigo teniendo esa extraña sensación y la casa no ayuda.

Primer día en la escuela

Esa mañana Amelia se levantó muy nerviosa, era su primer día en la nueva escuela de Amaurotam.

-Vamos Amelia, llegaremos tarde

Subió al carro con su papá y se fueron al colegio.

Cuando entró a su clase, se sentó en la única banca sola, sus compañeros se le quedaban mirando

-Hola ¿Cómo te llamas? -le dijo un compañero,

-Hola, soy Amelia Lambert, ¿y tu?.

-Yo me llamo Steve, un gusto.

Iniciando la clase Amelia se presento ante todos.

En clase Amelia platicó con Steve y se conocieron mejor.

En recreo Amelia se junto con Steve, platicaron sobre el pueblo y la invito a dar un recorrido terminando las clases, Amelia dijo que le gustaría pero tenia que acomodar su habitación.

Terminando las clases la mamá de Amelia pasó por ella y su hermano Austin, les pregunto que tal les había ido en su primer día de clases.

Amelia respondió: Genial mamá, conocí a un compañero que se llama Steve y me cae muy bien, me ayudo mucho el día de hoy.

Llegaron a la casa, comieron y Amelia se puso a limpiar su habitación, en cuanto limpio el closet encontró una caja con 2 muñecas de porcelana y papeles que estaban vacíos.

AmaurotamDonde viven las historias. Descúbrelo ahora