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Un rayo de luz solar atravesaba mis cortinas ásperas desgastadas por aquellas malditas polillas que no fumigue hace ya un buen tiempo, esta luz que se deslizaba hasta las palmas de mis manos empezó a quemar mi piel, no pude soportar ni 3 segundos cuando volví a meter mis dedos dentro de las sabanas sucias que nunca habían sido lavadas ni por error, entre ellas me encontraba yo, recién levantado, con unas ojeras tan negras como la habitación en la que estaba.

Volteé hacia mis alrededores en aquella pequeña habitación, una rata caminaba por mis piernas buscando algo de comida regada por el piso, la tome con mis manos para que no escapara por los tantos hoyos no tapados que abundaban por la casa. La mire unos segundos, pase mis nariz por su pelaje para ver que tal su olor, la sostuve por unos pocos segundos mas y me decidí... la mordí.

Su sangre llenaba mi boca seca por la falta de líquidos, sangre sucia, sangre sin nutriente alguno, a pesar de que su sabor no era ni cerca al de un humano, saciaba mi hambre temporalmente, esta apenas y era suficiente para poder levantarme de mi saco de dormir, pero peor era nada.

Realmente ya era tarde, 5 para las 7 de la noche, la luz que me llego a tocar era el sol que se ocultaba, mi señal para poder salir a buscar una víctima, quite los candados de mi puerta de madera podrida y me dispuse a salir, apenas a los segundos pude notar un aroma a heces y putrefacción cerca del pasillo principal, Salí apurado de aquel lugar ya que el olor era insoportable, no sin antes tomar mi gabardina negra aun con algunas gotas de sangre de la ultima persona que asesine, mis lentes negros cubrían completamente mis ojeras haciéndome posible salir apenas exponiéndome al sol incandescente del crepúsculo.

No paso mucho antes de que el sol se ocultara sumiendo a las calles en una penumbra que apenas y era alumbrada por faroles intermitentes, solamente me dedicaba a vagar por las calles solitarias de la ciudad donde alguna vez camine en mi forma humana sin alguna preocupación, sin tener el miedo de morir de hambre o simplemente ser alguien común y no esta cosa que odio; cerca de una tienda de conveniencia cualquiera se encontraba esa chica, la empleada de la madrugada, Karla, Darla, Ana o algo así era su nombre, alguna vez pensé en acabar con ella, arrebatarle su vida así como su sangre que atraía mi olfato por su dulzura, la vez que escarbaba en la basura por ratas o algo que tuviera sangre y me tiro agua fría quedo muy profundamente enterrada en mi memoria de tal manera que le guarde cierto rencor y odio por eso, podría haberla privado de su vida en ese mismo momento si no fuera porque estaba a punto de salir el sol al que tanto miedo impartía en mi. Después, al siguiente día, cuando me estaba preparando para atacarla, me ofreció un poco de comida ya apunto de caducar del stock del almacén

-Perdón por lo de ayer, realmente no estaba en mi mejor humor, tuve algunos problemas y me desquite con alguien que no se lo merecía. -Decía mientras estiraba su mano con una lata de atún y una cuchara, su tono de voz, la manera en que lo decía eran de alguien que realmente lo sentía.

-Okey, aceptare el atún y tus disculpas. -Le quite de sus manos la comida y me retire del local, lo único que necesito es sangre para poder seguir con vida, la comida es meramente banal para mi, termine tirando esa lata de atún oxidada a las pocas calles, el gesto es lo único que cuenta supongo...

Desde ese día me pasaba algunas horas rondando por las calles de aquella tienda, solamente vigilando las b deshabitadas; esperando que Darla o Karla o como se llame, terminara su turno antes de que saliera el sol que marcaba el fin de su jornada. A veces pasaba a la parte de atrás y ella salía a fumarse un cigarrillo o simplemente tomar aire y escapar momentáneamente de aquella jornada tan sofocante, me llevaba comida o una bebida que encontraba fuera del almacén, aunque no las necesitaba se las aceptaba y mas de una vez entable conversaciones cortas, sin tomar en cuenta a las ratas podría decirse que ella era el único ser con el que pasaba la mayor parte de mis noches de desvelo.

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⏰ Última actualización: Apr 28, 2022 ⏰

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