Diario de un Mercenario(Capítulo 1)

Prólogo

Mercenario:- Hola, Señor Barrios, buen día.

Sr. Barrios:- Hola amigo mío, ¿a qué viene esta visita?

Mercenario:- Tomé su consejo y escribí un diario con mis vivencias e historias.

Sr. Barrios:- Me alegro mucho, a la gente le encantarán sus historias y el mundo en el que vivía.

Mercenario:- Necesito a alguien que escriba el prólogo de mi diario y no vi mejor persona que mi mayor confidente.

Sr. Barrios:- Será todo un placer poder ser la voz que adentre a los lectores a su mundo.

Mercenario:- Mire que será un trabajo difícil, ¿cree usted que estén listos para un mundo tan distinto?

Sr. Barrios:- Oh, amigo mío, lo estarán, solo los verdaderos soñadores entenderán sus historias. Usted disfrute su retiro y lo llamaré cuando lo termine.

Es un honor para mí introducir a los lectores en un mundo lleno de fantasía, oscuridad y sobre todo, muerte.

Algunos dirán que son historias de terror, pero no, son mucho más que eso. Son historias de un hombre distinto a todos en un mundo donde la muerte es lo más normal. Quiero que se quiten prejuicios y la idea de buenos y malos, hagan lo que yo mismo estoy haciendo ahora, recordar esas noches en las que el mundo de la imaginación o de los sueños los llevó a un sinfín de aventuras y pesadillas.

Si aún no están dentro les dejo la puerta abierta, créanme que no se arrepentirán. Diario de un mercenario es eso, una puerta a un mundo lleno de sueños y pesadillas.

Ojalá entiendan al mercenario tanto como para soñar ustedes mismos. Les hago una pregunta ¿Recuerdan la última vez que soñaron como niños?

Hay una frase de Nietzsche que me gusta mucho, dice algo como "El mundo real es mucho más pequeño que el mundo de la imaginación". Los invito a reflexionar sobre esta frase, sé que vienen por las historias del mercenario, déjenme darle un consejo, mantengan la mente abierta en todo momento y dejen volar su imaginación.

En el mundo real existen puentes que unen ambos mundos que se simplifican en una palabra "Arte". El arte es la unión entre ambos mundos, anímense a probar cada uno de sus puentes y descubrir su camino.

Este libro va a ser eso, un puente hacia un mundo nuevo, totalmente distinto al nuestro, piérdanse en cada relato y sientan cada descripción como si la estuvieran viviendo. No lo lean, imagínense y vívanlo como si fuera su verdadera vida.

Los dejo con el mercenario, cuídenlo, suele ser un poco sentimental, es un soñador nato de otro mundo. Apreciemos que alguien del mundo de los sueños viene a contarnos sus historias.