Minho volvía a casa cabizbajo, las grandes gotas de lluvia caían sobre él, pero le restó importancia, no había nadie por las calles, normal, con la que estaba callendo quien iría a pie? Montones de coches pasaban a su lado, empapandole aún más al pasar por los charcos.
Sintió una extraña brisa cálida y levantó la mirada, logró enfocar su vista en una figura de baja estatura, hombros estrechos, cintura diminuta, piernas delgadas y sus pies estaban posicionados de una peculiar pero adorable manera, juntando las puntas y formando un triángulo.
Sonrió, le recordó a su desaparecida pareja...
Porque sí, el novio de Lee Minho había desaparecido hacía unos 8 meses, por culpa de una maldita agresión homófoba que sufrió por parte de sus compañeros de la universidad.
Obviamente Minho había llevado la noticia a la policía, tenía las pruebas necesarias para inculparlos, pero los policías locales no hicieron nada al respecto. Así que acudió a la fiscalía donde finalmente consiguió que encarcelaran a parte de esos idiotas
Pero... Su novio nunca apareció durante todo ese tiempo, pensaban darle por muerto, pero Minho se negaba rotundamente.
Parpadeó un par de veces, pero la silueta seguía ahí. Varias veces tenía alucinaciones con cosas así, por ende pensó que era su imaginación haciéndole ver cosas otra vez, así que sacó las llaves de su bolsillo y se dispuso a abrir el portal de su edificio.
Las luces de la calle se apagaron tras un estruendoso trueno y le pareció escuchar un grito, se giró hacia el sonido, esa voz...
Los relámpagos que al manifestarse avisando que después sonaría el trueno dejó que la escasa visión de Minho pudiera divisar aquella silueta tapándose los oídos por los fuertes ruidos de la tormenta.
Otro relámpago Seguido del trueno más ruidoso por el momento. Hasta Minho se asustó.
Pero la misteriosa persona estaba peor, logró ver cómo caía al suelo y sus gritos de terror eran más sonoros que la tormenta, era más que evidente su estado de pánico
El corazón de Minho se estrujó al presenciar eso
MINHO HYUNG!- Ese desgarrador grito cortó la respiración del nombrado
¡¿Era él?! ¡¿Realmente era su Han?!
Corrió hacia él, las gotas de lluvia se mezclaban con sus lágrimas, no le importaba quedar aún más empapado.
Calló de rodillas lastimandose otro relámpago, era él, era su precioso chico de ojos brillantesy mejillas esponjosas.
Le abrazó con fuerza porque era consciente de que se asustaria por el inminente estruendo. Atrapó su rostro entre sus brazos, obstruyendo el ruido con su pecho y sus manos.
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