Enfermera de mi hija (Jimin y tú)

capitulo 9

Narra tn
*Desperté a causa de un horrible dolor de cabeza, parecía que tuviera resaca, me levanté con cuidado de no despertar a Jimin y me puse mi ropa interior, tome una camisa de Jimin y me la puse, a pesar de que somos casi de la misma altura la camisa me quedo lo suficientemente larga para parecer vestido, baje y fui a la cocina a buscar una pastilla para el dolor de cabeza, al encontrarla tome un vaso y lo llene de agua, me tomé la pastilla pero no sirvió de mucho porque salí corriendo a vomitar, expulse lo poco que tenía en mi estómago, esto ya me está comenzando a preocupar, podría ser la gastritis lo que me está provocando tanto vómito, tendré que pedirle a Jin que me haga un chequeó, me cepille los dientes y regrese a la cocina, prepare el desayuno, lo cual era solo pan tostado, Nutella y frutita picada, todo acompañado de jugo de manzana, en eso sentí como alguien me abrazaba por la cintura y depositaba un beso en mi hombro, no necesitaba ser adivina para saber quién era*

Jimin: te ves muy sexy usando solo una camisa mía

tn: buenos días a ti también

Jimin: que rico se ve todo amor

tn: no tenía muchos ánimos de preparar la gran cosa

Jimin: lo que sea que prepares, así sea solo cereal, estará bien para mí

tn: a la próxima solo te daré cereal

*Nos sentamos a comer, a petición de Jimin yo estaba sentada en sus piernas mientras comíamos, lejos de incomodarme se sentía realmente bien, al terminar de comer lavamos los platos y luego nos fuimos a sentar al sofá, siempre yo en su regazo, cabe recalcar que Jimin solo traía puesto su boxer y una bata de pijama, estábamos viendo una serie en la televisión (Vincenzo ahre) pero sinceramente ninguno de los dos le estaba poniendo atención, estábamos más concentrados en darnos cariñitos, poco a poco esos cariñitos fueron subiendo de tono al punto de ahora encontrarme sentada a ahorcadas sobre Jimin mientras esté ya no tiene la bata y yo ya no tengo puesta su camisa, mis caderas hacían movimientos circulares sobre su entrepierna provocando que nuestras intimidades rozarán entre sí, él ya estaba bien duro y yo lo suficientemente mojada para recibirlo, de un momento a otro la ropa desapareció y Jimin ya estaba alineando su pene en mi entrada, lo metió de una y sin tantos rodeos sacándome un fuerte grito y haciéndome echar mi cabeza hacia atrás, comenzó a embestirme lenta pero profundamente, mis caderas se movían al compas de sus embestidas, de nuestros labios salían gemidos de puro placer, mis uñas pasaban por toda la espalda de Jimin mientras él mordía y succionaba mis senos, poco a poco sentí como mis paredes vaginales comenzaban a apretar cada vez más el pene de Jimin y como esté daba una y otra vez en mi punto sensible, aumento sus embestidas, mis gemidos se transformaron en gritos pero muy lejos de ser de dolor, se lograba identificar que estaban llenos de placer, unas embestidas más y Jimin se corrió dentro de mi mientras yo me corría sobre su miembro, nuestras respiraciones eran débiles, Jimin se quedó más tiempo dentro de mi mientras me besaba, acariciaba mis piernas y cintura, yo acariciaba su espalda y abdomen, unos minutos más pasaron así cuando la excitación inundó nuevamente nuestros cuerpos iniciando así otra ronda más de sexo y placer, mucho placer, sin duda con Jimin nunca era suficiente, siempre quedaban ganas de más y lejos de molestarme, me encantaba lo salvaje y sensual que llegaba a ser Park Jimin en la cama, sin duda me gane la lotería con este hombre, después de dos horas en aquel sofá y en la cocina, decidimos irnos a dar un baño, mismo que terminó en otra cosa pero al final si nos bañamos, al terminar el baño busque ponerme algo cómodo pues nuestro único plan era ir al cine, así que me puse algo casual y cómodo*