La mejor boda STONY

Una boda y un muerto

POV TONY

Les hablo un poco de mí, soy Tony Stark, sobran las descripciones porque sé que todos ustedes me conocen. Soy el mejor weeding planer de todo Manhattan y ahora mismo estamos cargando con un muerto fuera de la boda que acaba de empezar, pero...no nos adelantemos, aún tienen que conocer a alguien.

2 horas antes...

-El cura no tiene antecedentes, el monaguillo está limpio y la novia a punto de llegar -fue todo lo que me dijo mi amigo Bruce que formaba parte de mi equipo de organización...junto con Clint-

- ¿Está lista la música Clint? Clint... -mierda el idiota se volvió a quedar dormido-

Clint Barton, lleva trabajando con nosotros alrededor de 3 meses a petición de Bruce que esta perdidamente enamorado de él, y si, es un verdadero grano en el trasero, pero no me malentiendan, se le agarra cariño al desgraciado.

-Maldita sea Barton despierta -le di una cachetada que no pasó desapercibida para los invitados, especialmente un chico rubio que está bastante guapo-

-Tony, la novia entrará en 3...2...1... -escuche decir a Bruce por el comunicador-

La ceremonia se desarrolló sin mucho que contar, lo típico de las bodas, tuve que darle otra cachetada al novio que estaba indeciso, la sotana del cura prendió fuego por culpa de Barton y al intentar apagarlo no me di cuenta de que el agua bendita del sacerdote era Vodka así que lo mandé a urgencias, pero todo estaba bajo control, nada que no haya pasado antes.

Ya había finalizado la boda y estaba en plena celebración cuando vi a Barton molestando a un hombre de avanzada edad, de verdad que si Bruce no hace algo pronto con él lo mataré, juro que puedo hacerlo.

-Pues como te iba diciendo Iván...

-Barton ¿Qué coño haces? -me interpuse entre él y ese señor que ni se movía-

-Estaba diciéndole a Iván sobre la situación del país

-Señor ¿Está usted bien?

El sujeto en verdad tendría la peor resaca del mundo, intente llamarlo, pero estaba frio al tacto, le tomé el pulso y efectivamente, el viejo estaba muerto. Barton llegó al rato con la silla de ruedas que le había pedido y condujimos discretamente al difunto hasta la ambulancia, pero...la novia llegó y perdimos al muerto.