Jungwon's baby [Heewon] ²

uno

Antes de comenzar con la historia, por las dudas les vuelvo a recordar que esta historia tiene un primer libro y se llama "Anticonceptivos", si no la leyeron, porfa, vayan y recién regresen ♡

muchas gracias a redfox_graphs por la hermosa portada, separador y banner, como siempre impresionándome mejor que antes💗

muchas gracias también a @ifsvantaes por dejame adaptar amabas historias ♡♡♡

cualquier error que vean no duden en hacérmelo saber♡

Jungwon sabía que su pequeño trasto de cinco meses no molestaba mucho que digamos, al ser pequeñito y muy inactivo, apenas y causaba molestias, pero aún así, recibir la llamada de la guardería le alertó bastante y cuando llegó al recinto únicamente se encontró a Heeseung cargando a su hijo, susurándole cosas porque estaba llorando mucho.

En cuanto se acercó más, el pequeño pelinegro alzó su cabecita en busca de su papá, estirando sus bracitos en su dirección comenzó a sorber su naricita.

--- Daa~... --- dijo en tono lastimero siendo cargado por el omega, se acurrucó en sus brazos en seguida, sintiendo las caricias de Jungwon en su cabecita y mejillas.

--- H-hola... --- murmuró bajito el omega intentando evitar a Heeseung, que aparentemente muy molesto bufó cruzándose de brazos.

--- ¿Por que has tardado tanto? --- renegó viéndole con una mueca, el menor solo suspiró relamiendose los labios.

--- Estaba trabajando... --- murmuró con el ceño fruncido --- ¿qué han dicho? --- cuestionó con la mirada preocupada al alfa, el mismo bufó comenzando a caminar, muy despistado y a pasitos cortos el más bajo le siguió.

--- Está enfermo y debes cuidarlo en casa... --- Jungwon frunció sus labios ante esa idea, su niño alzó su carita para verle, sus ojitos rojos eran una señal conocida de cuando lloraba mucho y sus mejillas ahora de un color carmesí le daban a entender que su bebé estaba mal por lo calentito que se sentía.

--- ¿Haces... algo estos días? --- preguntó tímido al poder curbir su puesto en el trabajo, escuchó un fuerte resoplo de parte de Heeseung, pero tendría que intentar dejar al bebé con él pues le era imposible faltar al trabajo por dos días indefinidos.

--- Si, Jungwon, yo también trabajo --- constestó tosco, y el castañito sintió sus ganas de llorar presentes.

--- T-también es tu hijo... --- susurró bajito casi para él mismo, aunque el mayor lo llegó a escuchar con claridad.

No quería molestar más, así que sin despedirse comenzó su camino a casa con su cachorro en brazos, no disponía de coche así que le tocaba caminar durante veinte minutos para llegar a su casa, ahora veía que era muy mala idea dejar a su cachorro en esta guardería solo porque era más barata que la que tiene a unas calles de su departamento.