Tu chico de los recados [Jack Ross y tu]

6. "Mike"

Tania.

—tengo una idea— propuso Naya —llamaré a Will para que traiga su auto.

—muy bien chica lista, y ¿que haremos con esto? — señale la motocicleta.

—¡ya se!— casi me rompe los tímpanos.

Después de contarme su plan, que por cierto era bueno pero no muy seguro ya que ella estaba algo loca y yo no.

—No, no vamos a hacer eso.

—¿por qué? Es un gran plan, además veras a Ross— se quejó.

Es exactamente por lo que me niego.

Casi tenemos ejem.

—no, además tengo planes.

Mentira.

—bien, solo llevame al piso de Ross, quiero ver a Will.

—pero no se como llegar.

Otra mentira.

—yo te digo, anda.

No me quedo de otra más que aceptar.

No me costo mucho llegar ya que su piso estaba más cerca que la residencia. Naya bajo entusiasmada y yo solo la seguí.

Al llegar a su puerta ella llamó a Will y este no tardo en abrir.

Y ahí estaba.

Mike.

El chico que me beso cuando estábamos ebrios, aun lo recuerdo, fue hace un año en un bar. Él buscaba chicas, yo buscaba olvidar. Conclusión: un taxi con vómito, risas por todos lados y los dos en mi cama.

No pasó nada.

—Tania—Naya paso su mano varias veces frente a mi —siéntate, te quedaste como estatua.

—cayó en los encantos de el parásito— habló la chica rara, la de el libro, si la conocen ¿cierto?.

—No— me apresure a decir —solo lo conocí en un bar hace un año.

Ah. Fue todo lo que dijo Naya antes de desaparecer en el pasillo junto a Will.

No. No. No.

—soy Sue— habló la chica — pero no me hables.

—vamos Susie — le dijo Mike — trata bien a las visitas.

—calla, parásito.

Y empezaron a discutir.

Pasaron unos minutos eternos hasta que oi el ruido de la puerta, y al parecer ellos también porque se calmaron.

Ross.

Entrando por esa puerta, con comida.

Lo siento, tengo hambre.

Tal parece que Mike también vio la comida porque se la arrebató y corrió.

Ross se quedó en estado de shock porque no se movió hasta que se abrieron las bolsas de comida.

Mike estaba sentado a mi lado abrazandome y contandome su vida.

Yo le preste atención en todo momento, a mi me gustaba que me prestaran atención cuando hablaba sobre algo que me gustaba, y al parecer a él también.