Me despierta el sonido del móvil vibrando. Enciendo el movil e intento enfocar. Las dos de la mañana es lo primero que veo y seguido leo su nombre.
"Hola, perdón si te despierto pero necesito ir a tu casa"
-"¿Ahora?"
"No puedo dormir en mi casa"
"Mándame la ubicación"
-"Ubicación en tiempo real"Vuelve a despertarme la vibración del móvil
"Abre"
Me destapo y hago mi mayor esfuerzo para abrir los ojos. Deambulo por el pasillo e intento no caerme por las escaleras hasta llegar a la puerta y abrirla.
-Hol...
La miro y me doy cuenta de que me está mirando de arriba a abajo. Caigo en que solo voy en calzoncillos pero tengo tanto sueño que no me entero de nada.
-Pasa y deja las zapatillas en la entrada
-¿Tus padres?
-Trabajando
Asiente y se arrodilla para quitarse las zapatillas. Aprovecho para mirarme en el reflejo del cristal de la puerta y compruebo que voy medio desnudo y con los pelos revueltos.
Escucho sus tripas rugir y ella se da la vuelta rápidamente.
Frotándome los ojos me dirijo a la cocina.
-Ven
-No tengo hambre
-Ya, ¿Algo en concreto? mientras abro la nevera
-No
La miro fijamente y me despierto del todo cuando la veo empapada.
-¿Está lloviendo?
-Un poco
-Espera
Subo rápidamente las escaleras y cojo la ropa más pequeña que tengo por el armario. Antes de pasar la puerta que da a la cocina la veo con las manos en la cara y llorando. Se empieza a apretar fuerte el pelo e inmediatamente le doy un abrazo. Sus piernas se quedan sin fuerzas y consigo sostenerla. La consigo llevar hasta el baño y se sienta en un taburete.
-Tienes ahí champú y eso de mi madre y te he traído ropa seca.
Asiente pero sigue sin moverse. Si sigue así se va a resfriar. Le consigo quitar la sudadera y los calcetines. Veo que se va a quitar la camiseta
-Voy a hacerte algo para cenar.
Consigo hacer unos huevos revueltos con jamón y ensalada. Llamo a la puerta del baño.
-¿Se puede?
Abre ella la puerta mirando fijamente al suelo y noto toda la calor del baño saliendo. Le señalo la comida y se apresura en sentarse y comer.
-Deja de mirarme
-¿Está bueno?
Levanta la mirada y con la boca llena sonríe.
-Tu casa es muy grande
Se asusta cuando nota algo subir por sus piernas.
-Tss tss Kei no, la comida no.
Yu se rie y Kei frota su cara con la suya ronroneando.Subimos las escaleras y entramos a mi habitación. Por supuesto Kei no se ha despegado de ella porque siempre hace compañía a las personas. Yu repasa mi habitación de arriba a abajo aunque solo entre la poca luz de la calle, y yo me meto en la cama porfín. Son las cuatro de la mañana. Ella se mete en la cama pero se queda en el borde y al darse la vuelta me roza, está helada y sin pensarlo la rodeo con los brazos.
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expectativas
Teen Fictionun chico y una chica muy reservados se dan cuenta de que tienen muchas cosas en común.