Floyd Arcano, Humano a medias

Capitulo I: El rey cucú

- Hay momentos en la vida que te hacen sentir que los minutos son horas, los días son meses y los años son siglos, esto de abandonar el reino para buscar quien soy ahora y lograr mi venganza fue una mala idea. Habían pasado ya mas de dos años luego de mi terrible derrota y posterior deformidad, ahora era un ex soldado recorriendo el camino de la magia solo para encontrar una forma menos sangrienta de vivir. Además sostener una espada con una mano mecánica no es tan sencillo, esta cosa a veces no me hace caso. -

Hacia ya varios kilómetros que Floyd se había alejado del reino y gracias a sus modificaciones corporales, había podido sobrevivir mas tiempo que un humano promedio sin comida ni agua. Sin embargo, esto pronto se convertiría en un problema ya que no había indicios de dichos suministros, cerca de el. Fue entonces cuando para su suerte, diviso a lo lejos unas puertas enormes solidas como un muro. - Creo que mi suerte puede cambiar - dijo Floyd tomando impulso y corriendo en dirección a las puertas.

Una vez en frente de las enormes puertas, Floyd levanto su brazo mecánico y se dispuso a golpear, después de tres golpes la puerta se abrió, dejando ver un pueblo humilde pero muy desarrollado, con un mercado a la entrada y al final un gran palacio. - Este lugar me trae recuerdos - pensó Floyd mientras admiraba el enorme castillo. Una vez abierto, observo como se venia acercando un hombre alto con armadura, piel un poco sucia por batalla, un par de heridas en su cara y un gesto que aparentaba ser de pocos amigos. - Nombre y propósito de tu visita - dijo el hombre con voz clara y directa. - Mi nombre es Floyd de Irvinholy - exclamo Arcano mientras se aclaraba la garganta. - Solo busco refugio y alimento, voy de paso no planeo quedarme -. El hombre lo miro por unos momentos con gesto incrédulo, luego esbozo una pequeña sonrisa - Sígueme, te llevare con nuestro rey -.

Enormes muros, cubrían la ciudad, amplias calles se abrían ante Floyd y su desconocido guía. Poco a poco se observaba cada vez mas cerca el castillo, con sus cúpulas rojas y empinadas apuntando al cielo como si quisieran alcanzarlo. En la cúpula central, que era las mas grande y amplia, en lugar de una punta, hondeaba una bandera roja con tres soles, dos de ellos amarillos y el central negro. - Durante mi servicio conocí muchos reinos y sus respectivos símbolos pero no recuerdo este - pensó Arcano para sus adentros mientras entrecerraba los ojos para enfocar la bandera y recordarla.

Finalmente se toparon con la puerta principal del castillo, alta como sus cúpulas y con los mismos 3 soles en el frente. De pronto una pequeña ventana a un lado de las puertas se abrió y una voz grave salió de ella acompañada de dos ojos negros y penetrantes. - ¿Palabra clave? - a lo que el guía serio respondió - Logi -. Inmediatamente la ventanilla se cerro y las puertas empezaron a abrirse. A paso que se desaparecían las puertas, se dejaba ver un gran salón profundo, con alfombras rojas largas y banderas en cada extremo, todas igual a la de la cúpula. Floyd empezó a adentrarse en el palacio, en compañía de su malhumorado guía. - Alto - Dijo el hombre al llegar a una pared al fondo del salón, acto seguido puso su mano en el bolsillo y saco lo que parecía ser una libélula hecha de oro. Abrió su palma y coloco la libélula en ella para luego ofrecérsela a la pared.

La libélula de pronto cobro vida y empezó a volar por entre los ladrillos de la pared, como buscando una hendija para colarse. Finalmente se mantuvo en frente de un ladrillo y en un parpadeo lo atravesó como si fuera invisible, - parece que esta vez es este - dijo el guía mientras atravesaba con la mano el ladrillo que había escogido la libélula y haciendo un gesto de esfuerzo como queriendo alcanzar algo del otro lado del ladrillo, jalo algo dentro de este que hizo que la pared comenzara a abrirse. - ¿Por qué tanto protocolo para ver al rey? si puedo preguntar - dijo Floyd en un tono curioso. - Nuestro rey es un hombre muy cuidadoso, por no decir paranoico - exclamo con seriedad el guía mientras avanzaban a través de la pared.

Una vez adentro, se encontraron con un hombre delgado, de estatura promedio, cabello largo oscuro que bajaba hasta su cintura en una trenza y andaba con ropas de caballero pero una capa de rey. Parecía como si un mercenario hubiese asaltado un reino y se haya puesto la capa en gesto de victoria. El hombre estaba de espaldas a ellos y observando un cuadro enorme arriba de una chimenea mientras sorbia vino de un cáliz dorado oxidado. - Es hermoso ¿no creen? es increíble como el artista proyecta sus inseguridades en el cuadro, se puede ver claramente como el hombre arriba del caballo llora mientras ve a sus hombres morir - Floyd levanto la cabeza para mirar el cuadro, nunca se había sentido tan confundido.

Dentro del marco, solo se observaban manchas de distintos colores chorreadas sobre un canvas y mientras Floyd analizaba el cuadro escucho a su lado un sonido de burla que después fue silenciado por una mano. Era el guía que se había burlado del comentario del hombre. Floyd y el guía se quedaron observándose por unos segundos a lo que el guía respondió - luego te cuento - después adoptando gesto serio y aclarando su garganta dijo - mi señor, le presento a Floyd Arcano de Irvinholy - Floyd asintió con la cabeza y el hombre continuo - Floyd el es el rey cu...digo el rey Soriander de Astaroth - en ese momento una sensación como de hielo frio se deslizo por la espina dorsal de Floyd, sus ojos se abrieron y un gesto de preocupación invadió su rostro, - !¿ Astaroth ?¡ pero la Nightmare Raven desapareció ese reino en su ultima gira devastadora -

Justo cuando Floyd estaba dispuesto a preguntar, fue interrumpido por el rey - se lo que estas pensando, Astaroth cayo gracias a la Nightmare Raven ¿ como sigue en pie ? pues sencillo yo soy Astaroth, y mientras yo viva Astaroth vive - , Floyd quedo absorto ante la respuesta psíquica del rey, en sus viajes ya había conocido otros magos y psíquicos pero no se esperaba esto de un rey y menos de uno que parece tener su cerebro perdido. Luego desplazándose por la sala, Soriander le hablo al guía revelando por fin su nombre - Cavan, lleva a nuestro invitado al comedor, que le den alimento y bebida, discutan los asuntos de su visita. Yo estaré ahí en un momento - Floyd giro mientras Cavan le daba un pequeño golpe en el hombro en señal de que debían retirarse.

- Entonces...Cavan - Dijo Floyd mientras avanzaban, - tengo varias preguntas que hacerte pero primero, quiero que me cuentes porque te burlaste del rey - En ese momento Cavan sonrió mientras miraba al horizonte y caminaba a paso ligero. - No se si lo notaste visitante pero Soriander hace mucho tiempo perdió la cabeza. Veras el rey era un gran guerrero, peleamos muchas batallas. Sin embargo cuando la Nightmare Raven ataco algo se quebró dentro de el, cayo en la locura y perdió su norte, dejándome a mi a cargo de la guardia real- Un sentimiento de tristeza invadió el pecho de Floyd como sintiendo lastima por el rey, luego continuo - Lo lamento, entiendo el peso que cargas ahora, yo fui el capitán de la guardia de Irvinholy hasta que decidí irme...pero bueno, siguiente pregunta - su tono cambio como si hubiera olvidado la tristeza - Recuerdo perfectamente a Astaroth y sus símbolos, ¿Por qué su bandera es diferente ahora?- a lo que Cavan respondió - ¿No es obvio?, desde el ataque de esos saqueadores decidimos escondernos, cambiamos el nombre y los símbolos del reino, todo el pueblo fue informado y el rey ahora vive escondido.

Antes de que Floyd pudiese seguir con su interrogatorio, fueron detenidos por un arco macizo que abría paso a un gran comedor de techos abovedados, paredes de ladrillo cubiertas con bellas alfombras. Habían grandes mesas llenas de soldados y pueblerinos, al fondo del salón se podía observar una mesa larga con una sola silla, que por su aspecto daba a entender que era la mesa de Soriander.