El beso de Venus y Jupiter

Capitulo 1"Amor que se mendiga no es amor"

El beso de Venus y Júpiter.

CAPITULO 1

"Amor que se mendiga no es amor"

Despertó con el serpenteante olor a panques y café recién sacado de la cafetera, simplemente arrugo la nariz y se cubrió la cara con la mata morada con bordados de caballos que avía tenido desde su cumpleaños número ocho.

-Blitz, si no alcanzas a desayunar me iré sin ti a la oficina- la voz de su hijastra resonó por todo el pequeño departamento que compartían desde hace cinco años.

-ya voy- el diablillo rojo salió del sofá que presumía como cama y bostezo recargado en el respaldo y rascándose la barriga.

-hug- luna respingo ante tal escena, y prosiguió a servirse su porción de desayuno, el diablillo no tardo más de 10 minutos cambiándose y poniéndose su tradicional traje.

-veamos, que tenemos aquí- el diablillo no tardo en comerse tres de los panques y su taza de café matutino, Loona prácticamente ya estaba en la puerta sostenido las llaves de la camioneta, mientras el diablillo de dirigía a la puerta con su taza de café en la mano y unos pasos que Loona describiría como cómicos, al salir su padrastro ella salió cerrando la puerta tras de sí.

-tara, rarara, tara, rarara, rarararara, rarararara- un Búho gris azulado balanceaba la servilleta que el mesero le avía entregado para que pusiera en sus piernas, entre divertida y avergonzada su hija se cruzó de brazos mirándolo despectivamente.

-papá, pensé que este desayuno era para los dos, no pensé que traerías a ese idiota rojo en la cabeza- la chica tomo un poco de la fruta con yogur que le avían servido.

-ho, no yo, lo siento, tienes razón, no nos hemos visto desde que tu madre, hum- Stolas coloco la servilleta en sus piernas,

-hey, cumpliré dieciocho pronto, volveré a casa papa,- la chica embozo su mejor sonrisa,

-bueno, aunque después de la boda, claro espero no te importe algunos cambios- el Búho volvió a su aspecto radiante y feliz.

-enserio, a como era antes, creo que será un buen cambio, empezando con verte sonreí otra vez- Octavia dejo su tenedor a un lado del plato, y Stolas la miro extrañado,

-bueno, sabes es que... mi más grande temor cuando supe que engañaste a mi mama, bueno es que te veías tan feliz, que me preocupe que tú me... abandonaras... y bueno es que Blitz es un idiota muy idiota, pero al final te sacaba una sonrisa, y tu volvías a ser el viejo tú, y no un maniquí que mama parecía sacar del armario como alguno de sus bolsos- la chica parecía confundida.

-mi pequeña estrella, sabes bien que jamás te abandonaría, en mi momento de mayor obscuridad, tu presencia vino a traer significado a mi vida, y por más que ame a Blitz, no significa que dejare de estar ahí para ti, inclusive si tengo que arrastras a mi nuevo esposo junto conmigo-

-ho, eso sueno tierno, y extraño a la vez-

-estamos a una semana de la boda, y claramente no dejare que te la pierdas, aunque tenga que ir a juzgado con tu madre-

-tranquilo papa, Andrealphus ira a la boda, gracias a eso yo podre asistir- Octavia no aprecia tener ningún problema con su tío, pero la vena de la frente de Stolas resaltaba, suerte que sus plumas ayudaban a disimular.