Drive Thru [Moonsun]

Capítulo 7

«¿Hola, qué tal? por cierto, ¿puedo llamarte más tarde esta noche? tal vez alrededor de las 8 P.M? :D»

Byul casi vomitó la leche que estaba bebiendo en ese momento cuando abrió el mensaje de Yongsun, pero en el proceso de evitar la acción, la bebida pasó por la tubería equivocada, y ella comenzó a ahogarse. Inmediatamente soltó su vaso y se golpeó el pecho mientras soltaba dolorosas toses como un perro moribundo.

Después de calmarse, lo leyó de nuevo y rápidamente escribió una respuesta.

Oh Dios, esto es todo. Está a punto de hablar con su crush.

«Sí, claro. Sólo mándame un mensaje cuando estés a punto de llamar»

Oh dios mío, oh dios mío, oh dios mío.

Byul cree que esto es un récord por decir demasiados "oh dios mío" en un día. Son las 5 de la tarde, lo que significa que faltan unas tres horas para que Yongsun la llame y ella tenga que prepararse y tratar de abstenerse de actuar como una tonta.

Tres horas después, Byul se pasea por su habitación como una madre preocupada, con las yemas de los dedos a punto de sangrar por morderse las uñas constantemente. Fiel a sus palabras, su teléfono sonó a las 8 en punto, y casi se zambulló en el pobre aparato. Con el teléfono aún sonando y vibrando en su mano, respiró profundamente para calmarse.

Exhaló con fuerza y se dió ánimos.

Tú puedes Moon Byul.

Dio un clic en el botón verde del teléfono, y lo presionó en su oído con una sonrisa que amenazaba con brotar de sus labios.

— Hola.

— Hola.

Casi se ríe, pero decidió no detenerse cuando escuchó a Yongsun en la otra línea reírse también.

— ¿Qué pasa? — preguntó, incapaz de contener su emoción.

— No mucho, acabo de terminar mi turno en McDonald's. ¿Cómo te sientes?

¿Por qué me pregunta esto?

— ¿Eh?

Escuchó a Yongsun reírse desde el otro lado.

— Tal vez lo has olvidado. Condujiste hasta el autoservicio anoche, completamente ebria y fuera de sí.

¿Qué carajo?

Byul jadeó pero se cubrió la boca abierta con la palma libre. Sus mejillas enrojecieron y casi gritó de vergüenza.

¡De todos los malditos Mcdonald's y de todos los malditos autoservicios, tenía que ir donde ella trabaja!

¿Dónde están las arenas movedizas cuando las necesitas?

— E-Estoy bien, supongo — ella responde nerviosa. Fiel a sus palabras, ahora está bien. Todo lo que siente en este momento son los nervios.

— Okey, si tú lo dices — dice Yong. — ¿Estás ocupada el próximo viernes?

Dios mío, ¿me va a invitar a salir?

¡Ahhhhhhh!

— Sí, lo estoy un poco, muchos trabajos para terminar — responde apresurada.

— Cierto — entiende Yongsun. — Estaba a punto de invitarte al festival de baile este viernes. Mi equipo y yo vamos a actuar...

¿Festival de baile?

¡Soy solo humano y no puedo, por el amor de Dios, rechazar tal bendición!

— ¡SÍ!

Byul se golpea la frente con decepción. Se aclara la garganta y reúne toda la calma del mundo.