︎ ↳ ❝ [ WHAT IF I TOLD YOU ] ¡! ❞ Shawn + Harry.

⊱Parte IV⊰

Dedicado a: arely1012
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Harry lleva alrededor de diez minutos caminando de un lado a otro justo afuera de la habitación de su papá. Estuvo practicando dos horas antes el cómo es que va a salir del closet con él pero todo resultó siendo un completo fracaso.

Está nervioso, se muerde las uñas mientras Elías lo observa y de vez en cuando lo anima para tocar la puerta, sin embargo el rizado termina por arrepentirse y alejarse lo más que pueda.

Y es que lleva más de cuatro días pensando en hacerlo porque sabe que es el primer paso para animarse a lo siguiente, está convencido en confesarle sus sentimientos a Shawn, él realmente ya no puede seguir guardando todas las cosas que le provoca cuando lo ve a los ojos.

Sobre todo porque muere por probar sus labios y no le importa poner en riesgo el tiempo de amistad que llevan, quizás es momento de poner a prueba los consejos que su padre le da indirectamente antes de hacer una tontería.

Justo cuando finalmente está dispuesto a tocar, Desmond abre la puerta llevándose la sorpresa al verlo parado ahí, con la mirada confundida y un Elías tratando de aguantarse la risa.

—¿Qué pedo? ¿Qué verga traen ustedes dos? —El mayor se frota los ojos debido a que acaba de despertar de su siesta—. Dinero no tengo en efectivo y no tengo ganas de ir al banco.

—Papá uhm —Harry murmura al mismo tiempo que juega con sus dedos y busca ayuda mirando a Elías.

—Yo me retiro porque tengo cosas de chofer por terminar —palmea delicadamente al rizado dejando todo a su suerte.

—Ora qué chingados traen ustedes —niega un par de veces al mismo tiempo que se rasca el estómago y camina de regreso a su cama para sentarse en la orilla de esta—. ¿Pa qué me ocupas culero?

Harry se queda de pie en la puerta sintiendo que en cualquier momento las lagrimas comenzarán a salir, no sabe si está demasiado sentimental o sigue sintiendo miedo a pesar de que su papá no tiene ningún problema con las personas como él.

Sin embargo su madre pensaba de la misma manera, ella nunca tuvo problema cuando se enteró que Luke es gay, de hecho le dio muchas palabras de aliento para hacerle entender que siempre sería bienvenido.

Ese día Harry estuvo tan ilusionado, por primera vez se volvió a sentir querido a pesar de que su padre se encontraba del otro lado del mundo. Así que decidió tomar toda la valentía del mundo, se sentó en la cocina junto a Anne y lo dijo esperando cualquier reacción a excepción de la que tuvo en realidad.

Lo último que recuerda fue tener a su madre gritando un montón de insultos y repitiendo que apoyaba a las personas homosexuales siempre y cuando no estuvieran dentro de su familia.

Desde entonces no volvió a decirlo en voz alta, ni siquiera con las personas que conoció cuando volvió a Monterrey.

—¿Te vas a quedar parado ahí hijo de la chingada? —Des pregunta en tono divertido para aliviar la repentina tensión que se formó—. Te estoy hablando desde hace cinco minutos y no me haces caso.