Parte 2: Historia de Lu

1 0 0
                                    

Hola! Mi nombre es Lu, y desde que tengo memoria se que me apasiona absolutamente todo lo que tenga que ver con el medio ambiente, como los paisajes, la flora y los animalitos. A causa de esto, nació en mi el deseo de conocer todos los lugares más bellos que nos ofrece nuestro hermoso plantea. Yo nací en una comunidad que, aunque fuera pequeña y un poco alejada de la gran urbe, siempre gozamos de los mismos servicios que la ciudad poseía. Actualmente vivo con mis padres los cuales son increíbles, desde siempre me han dicho que mi forma de ser es única y espectacular, sin embargo, desde que les conté cual era mi sueño, ellos no lo tomaron para nada bien, ya que ellos consideran que no es algo que me de sustento para algún futuro, y que debería buscarme otra meta en donde en el futuro, me aporte mucho dinero. A pesar del desaliento de mis padres, la persona que nunca me falla es mi mejor amigo, el es la persona que siempre me escucha y me apoya sin dudarlo, y siempre que llego a perder el camino siempre me brinda un soporte para regresar al sendero que me llevara a mi sueño.

Una tarde en la que decidí dar un paseo por mis alrededores, me percate que había muchas personas con uniforme de constructores tachando muchos arboles, lo que llamo mi atención de inmediato y me acerque a averiguar que es lo que pasaba. Al acercarme a preguntar, uno de los hombres que vestía de constructor, me comento que debía de retirarme de la zona ya que estaban a punto de comenzar a deforestar la zona para tener vía libre, ya que iban a construir una gran casa. Al enterarme de esto, yo quede en shock y de inmediato les reproche que no tenían derecho de deforestar la zonza solo por el capricho de construir una casa tan grande, a lo que solo recibí burlas y regaños. Salí directo a mi casa, llena de enojo y totalmente indignada ya que no llegaba a comprender el porque se debía destruir un paisaje tan hermoso solo por el capricho de uno. Al llegar a mi pueblo, fui directo a casa de mi mejor amigo al que le platique todo lo que acababa de pasar, a lo que respondió que sus padres alguna vez le habían dicho que esa zona era un área protegida y que por ningún motivo se podían realizar obras ahí. Salimos de su casa para dirigirnos directo al centro del pueblito para contarle a todos los que pasaran lo que estaba apunto de acontecer.

Mucha gente solo pasaba y nos ignoraba, pero conforme mas gente nos ponía atención, se lograba que más se acercaran a escuchar, así se fue formando la noticia de que estaban apunto de deforestar una zona que a permanecido durante mucho tiempo sin ser dañada por la mano de obra de las constructoras. Así pues, la noticia llego a tantos lugares que al llegar a mi casa, mis padres esperaban sentados en la sala, llegue con mi mejor amigo y entre los dos les explicamos con mas detalle a mis padres. Ellos sin pensarlo dos veces, se nos unieron a todas las personas que queríamos evitar la tala de arboles del lugar. 

Nada perezosos, fuimos todos al municipio más cercano a levantar una queja de lo acontecido. Las autoridades tomaron cartas en el asunto y evitaron que la obra se llevara acabo. Al termino del conflicto, mis padres se dieron cuenta de que nada ni nadie puede hacerme retroceder cuando tengo mis objetivos claros. Al caer la noche, nos sentamos en la mesa del comedor, mis padres se veían muy serios, así que yo sentí que estaban a punto de darme la peor noticia de mi vida así que solo di un gran suspiro y me senté frente a ellos. Los dos permanecían callados, hasta que se miraron fijamente un rato y procedieron a decirme que a pesar de que ellos no estuvieran del todo de acuerdo con mi sueño, se dieron cuenta que es algo que me apasiona y es lo que quiero para mi vida, así que aunque les doliera el corazón, ellos estaban dispuestos a dejarme salir a explorar el mundo y que finalmente, si eso me hacia feliz, ellos eran felices también.

Finalmente llego el día, mis padres y mi mejor amigo me acompañaron al aeropuerto de la ciudad en donde partiría mi viaje. Yo sentía una gran mezcla de emociones: miedo, emoción, incertidumbre, pero sobre todo, felicidad ya que por fin sabia que contaba con el apoyo de mis padres y mi mejor amigo. Nos dimos una emotiva despedida y partí hacia mi sueño.

Parte 2: Historia de LuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora