MM93

Salvado por la campana e invitaciones

Más que peculiar sería graciosa. Lorenzo está al fondo del box sentado en una silla intentando quitarse de encima a Claudia quien está sentada en el brazo de la silla en un equilibrio precario intentando darle besos en el cuello y coqueteando con él sin ver las caras de asco que pone el muchacho. Aunque Laia le ha dicho que es un poco bastante antipático decide darle una oportunidad quitándole a Claudia. Se deja ver y se acerca a ellos con un poco de prisa

-          Ejem... Claudia —la llama María- tienes mi ropa por ahí es que quiero cambiarme y tú deberías hacer lo mismo —le tiende una bolsa con su ropa

-          Si, claro —responde con su voz chillona dándole una bolsa que está al lado de un armario. Le da un pico a traición a Jorge y se marcha dando saltitos

-          Oye, gracias por quitármela de encima —agradece Jorge- tu debes de ser la paraquera de Vale no?

-          Sí, la misma que viste y calza. Bueno, te dejo para que te concentres. Adiós —despidiéndose

Cuando llega a su sala y abre la bolsa, lo primero que hace es maldecir a la rubia por elegir ese tamaño de traje, hasta que mirándolo un poco más a fondo descubre que se puede modificar y adaptar. Suspira aliviada. Cuando ya lo tiene puesto pero sin adaptar a ella, por la puerta entra un torbellino vestido de amarillo. Es Laia. Se detiene por completo cuando la ve así vestida

-          María cariño, con eso se te ve el culo y vas a hacer que a todos los pilotos les tire el cuello del mono no sé si me entiendes —dice Laia moviendo las cejas

-          Tranqui, que no soy exhibicionista jajaj mira —responde María ajustándola- y tú date prisa... otra vez

-          Es que estaba celebrando con Tito —dice Laia mientras se cambia sonrojándose a la vez

-          Osea que pasa algo con él y no me dices nada... u.u

-          Me ha invitado a tomar algo esta tarde. Ya se verá que pasa

-          Pues anda que lo que me ha pasado a mi. Me he encontrado a la rubia de la ropa encima de Lorenzo y la verdad las caras que ponía el chico me ha dado pena y se la he quitado de encima

-          Sabes lo mal que se lleva con Marc no? Pues eso, que él tampoco es un santo —gruñe Laia

-          Bueno, pues entonces he hecho mi buena acción del día y venga que vamos tarde

Las chicas salen por tercera vez de su sala en dirección a pista donde esta vez María si que estaría en la primera línea, ya que la pole se la había llevado Rossi. El italiano y Lorenzo se jugaban el subcampeonato en tierras valencianas.

Marc afrontaba la carrera como una para disfrutar él y que lo haga la afición. Había conseguido el campeonato 3 carreras antes, en Japón. Aún así, su espíritu competitivo fue el que le llevo a ganar en Malasia hacia 15 días. Cuando entra a pista, busca primero a María quién ya está al lado de... Rossi? Su padre le había dicho que iría con él. De todas formas se acerca a invitarla a cenar con su hermano, sus padres y su equipo esa noche para celebrar los campeonatos. Todo por petición de Tito. Este muchacho cada vez era más raro, aunque la amiga de María tiene algo que ver en ello.

-          María —dice Marc llamándola y acercándose a ella- hola Valen

-          Ciao cabroncito —responde Valentino colocándose en la moto

-          Dime Marc que querias? —le dice María

-          Invitarte a ti y a tu amiga a cenar con mi familia, mi equipo y Tito y su padre los títulos

-          Porque me da que Tito y Laia tienen que ver en esto? Jajaja —rien los dos- acepto

-          Oye, tu no ibas a ir conmigo "mudita"? —pregunta curioso Marc

-          Luego te lo cuento en la cena y tira a tu sitio anda —contesta María- ah... y ya te demostraré que no soy ninguna mudita

Cuando Marc se marcha y Rossi se está concentrando, María busca a Laia. Cuando la ve, Laia está riéndose y María siguiendo su mirada averigua el porqué. Claudia está apoyada en la moto de Marc haciéndose selfies poniendo morritos hasta que uno de los mecánicos y Alzamora la regañan. Apenas un minuto antes del warm up, Laia y María salen juntas de la pista comentando el episodio de Claudia, riendo a carcajadas. Hasta que sienten una voz de llamarlas

-          María!! Laia!!! Esperad —dice un sofocado Álex corriendo detrás de ellas- os parece normal que después de mi carrerón de hoy para tener el titulo me hagáis correr otro?

-          Jaja que querias Álex? —pregunta Laia

-          Invitaros a las dos a ver la carrera de mi hermano conmigo y con Tito —dice Álex respirando mucho mejor

-          Ok, pero tiene que haber sillas porque ya me duelen los pies de los zapatos —se queja María