Semana Scisaac

Día 4. Azúl

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Dolor/Consuelo: Isaac regresa a Beacon Hills para la boda de Chris y Melissa e inevitablemente tiene una conversación difícil con Scott.

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Isaac experimento un extraño deja-vu cuando escucho la voz de su alfa gritar su nombre. El rubio detuvo su puño a mitad del camino de golpear la cara de Theo de nuevo, para girarse a ver al moreno con arrepentimiento. Un arrepentimiento que no estaba ni mínimamente relacionado con golpear a la quimera. Scott lo observo como asegurándose que no reanudaría su ataque, antes de inclinarse ante Theo.

—¿Estas bien? —pregunto con amabilidad ayudándolo a ponerse en pie. Stiles quien hasta el momento parecía haber estado disfrutándolo del show, puso los ojos en blanco ante la innecesaria preocupación del moreno.

—Solo dime si tengo que preocuparme por algún otro de tus ex-novios—respondió arrogante el chico limpiándose la sangre de la boca y mirando a Isaac de una forma que le provocaba borrarle esa expresión a golpes de nuevo.

—Lo lamento —dijo el moreno dejando salir un suspiro, entonces tomo su brazo con delicadeza para quitarle el dolor, logrando confundir más al rubio. Después de lo que le había contado Stiles, no entendía como el alfa aún podría preocuparse por él, como podía hablarle con tanto cariño, como podía mirarlo de esa forma.

Él daría todo porque Scott lo mirara así de nuevo. Sabía que no estaba en posición de exigir nada, había perdido su oportunidad cuando se fue a Francia, pero la realización de que el alfa se hubiera enamorado de otro chico en su ausencia, especialmente de uno que le hizo tanto daño, lo provoco un malestar que solo podría traducirse como celos, mismos que seguramente también detecto Theo, porque lo miro con superioridad al salir de la habitación sin siquiera agradecer el gesto de Scott. Ahora entendía porque no le agradaba nada a Stiles.

—Vamos, aún tengo que presentarte al resto —dijo Stiles levantándose dispuesto a salir de la sala, pero Isaac se quedó en su lugar.

—Está bien Stiles, yo lo haré —se ofreció Scott dándole una breve sonrisa.

Isaac conoció al resto de la manada y le agrado ver en todos una lealtad inquebrantable y confianza plena en su alfa. Era extraño como algunas cosas se veían igual, pero en el fondo las otras eran totalmente diferentes. Salieron de la casa reconstruida de los Hale y Scott le mostro la decoración de la unión que se llevaría a cabo entre Chris y Melissa. Las flores y las luces le daban un aire idílico al bosque de Beacon Hills, que Isaac nunca percibió antes.

—Te extrañé —dijo el moreno cuando se detuvieron en el borde de un claro, Isaac también lo había extrañado, todos los días pensó en él y aunque era la oportunidad perfecta de hacérselo saber por el contrario pregunto:

—¿Aun es parte de tu manada?— Su voz era dura, no había sido su intención, sabía que había arruinando por completo el momento pero necesitaba saber, el moreno asintió y entonces él insistió. —¿Por qué? Él...él te mato...

—No estuviste aquí, no lo entiendes es diferente ahora —contesto Scott y aunque no lo dijo molesto, había un deje de reproche en su voz.

Pero el alfa tenía razón, no estuvo cuando más lo necesito, si tan solo se hubiera quedado con él, Theo nunca hubiera llegado tan lejos. O tal vez se estaba engañando pero aun así no pudo detener la ira corrosiva que lo sacudió por un breve segundo, apretó los puños hasta sacarse sangre, confiando en que el dolor lo regresaría a su forma humana. Pero el error ya estaba hecho y debía enfrentar las consecuencias, aunque Isaac no esperaba que su alfa se enterara de esa forma del cambio en sus ojos al frio y sobrenatural azul.

—Déjame explicarte —empezó con su corazón latiendo agitado, ni siquiera podía mirarlo a la cara, porque la decepción de su alfa le dolería más de lo que podía explicar y esa definitivamente no era la forma en que Isaac imagino que sería su reencuentro.

—No tienes que explicarme nada.

El rubio sintió como si un balde de agua fría cayera sobre su cuerpo, al pensar que Scott lo podría sacar de su manada, pero cuando finalmente se armo de valor para mirarlo en la mirada de su alfa solo había comprensión y... ¿amor?

—Cuando estés listo, escuchare tu historia, no voy a asumir nada, ni quiero que te sientas obligado. 

—Gracias, en realidad planeaba contártelo hoy, pero ahora necesito preguntarte algo. A Theo... ¿Aun lo quieres?  

—Si. Y una parte de mi siempre lo va a amar —dijo y el rubio apretó sus labios a notar como Scott cambio el verbo querer por amar—. Cuando amo a alguien es como si le entregara una parte de mi corazón, una parte que siempre permanecerá con ellos sin importar que, lo mismo paso contigo....

—¿Eso significa que aun tengo alguna oportunidad? —pregunto Isaac sin ocultar el deseo en su voz. Scott de pronto se puso serio, como si pensará en la pregunta para después sonreírle abiertamente y aunque no era una respuesta, para el rubio por ahora era suficiente.

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