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Una morena bajaba las escaleras bostezando mientras su mano frotaba su cara intentando despertar, yendo hacia la cocina cruzo por la puerta y freno al ver el lugar hecho un asco, platos sucios, piso sucio, todo sucio, barrio el lugar con la mirada para luego ver a Hope sentada en una silla alta junto a la encimera.

—Lo siento querida, sabes que soy mala en la cocina — Sonrió fingidamente, llevando la taza de café a sus labios y viendo el celular en su otra mano

—Ni siquiera necesitas comer — Mascullo Josie

—Cierto— Ella rió — Bueno, son cosas que pasan, debo ir a pasear al perro —

—No tenemos perro— Josie entrecerró los ojos confundida viéndola salir de la cocina

—¡Tal vez haya robado uno anoche!— La escucho salir de la casa, Josie rodó los ojos y se giró hacia el montón de cosas sucias

—Hope Mikaelson, te juro que la pagaras cuando la enciendas — Siseo

****

—Perdón por llegar tarde, tuve un pequeño contratiempo— Suspiro Josie subiendo las gradas y sentándose junto a su hermana

—¿Hope está siendo un problema?— Pregunto Lizzie

—No tienes idea—Murmuro acomodando la gorra en su cabeza y viendo el partido de soccer de su sobrina

—Te ves guapa hoy, por cierto —  halago la rubia, Josie sonrió, intentaba llamar la atención de Hope por lo menos, pero no funcionaba, desde hace un mes ya, Hope había apagado su humanidad por culpa de un psicópata que Josie agradecía que estaba muerto

Al principio creyeron que regresaría sola, pero con el paso de las semanas de dieron cuenta que no

—Allá está el entrenador, acompáñame, tengo que preguntarle cosas antes de que llegue Penélope — La rubia rapido tomo sus cosas

—¿Cosas como cuáles?—

—Como ¿Por qué mi hija no es capitana? Mírame, soy muy deportista, ella heredó eso — Agitó las cejas y Josie rodó los ojos

Ambas bajaron y fueron hacia el hombre con uniforme

—Entrenador Robinson— Lizzie sonrió

—Si son mis gemelas favoritas— Sonrió él

—Hola— Josie sonrió, el tipo era atractivo si, alto, fornido, cabello rubio, ojos café, conclusión: sexy

Pero no el tipo de Josie, ni el de Lizzie

—Yo quería...— Lizzie comenzó a hablar

—Lizzie— Los tres giraron para ver a Penélope de brazos cruzados y con una sonrisa divertida —¿Que ibas a preguntar, cariño?— alzo una ceja

Josie rió al ver la cara de su hermana, ella ya había presenciado esto antes, Penélope le decía a Lizzie que debía dejar que su hija progresará sola en el juego y Lizzie bueno, Lizzie es Lizzie

—Nada bebé, solo...iba a preguntar cuando había practica— Sonrió y se acercó a la mujer

—Ven, acompáñame al auto, traje lo que necesitabas— Tomo su mano

—Bien, Josie, ya regreso— Hizo señas de que vigilará a su hija, Josie asintió

Ambos se fueron y Josie quedó en silencio junto al hombre

—Y...para cuando tienes un bebé?—Pregunto él, Josie le miro —¡Lo siento! Eso sonó raro— Él rió— Hablo de ¿Quieres ser mamá?—

—Por supuesto, pero siento que aún es muy pronto, hace solo dos años me case con Hope— Murmuro, el asintió

Hosie Donde viven las historias. Descúbrelo ahora