Capitulo 11: Ella es mi todo...

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Narra Malia:

Estaba en un mundo hecho de dulce, como en el video de "California gurls" de Katy Perry y de repente llego un unicornio y me monte en el y empezó a volar por los aires y podía tocar las nubes, eran de algodón de azúcar y de la nada empezó a llover caquita de unicornio del cielo y nutella, los Ángeles cagaban la nutella y los unicornios la caca que por cierto sabia a gloria.

Estaba por entrar al mar de chocolate cuando sonó la puta alarma, puta alarma de mierda hija de Snow y de su pacífica madre.

Con la mayor pereza del mundo estire mi brazo para apagarla pero no se callaba así que la agarre y la avente al suelo con todas mis fuerzas, pero seguí sonando, me levante frustrada y agarre el bate de béisbol que tengo debajo de mi cama por si alguien entra a la casa para defenderme, y empece a golpear el maldito reloj de muerda hasta que se callo. Solté el bate y me metí a la cama, eran apenas las 6:30 a.m y entraba hasta las 8 al instituto aún tenía tiempo.

Estaba quedándome dormida cuando entro el puto de mi hermano con un sartén y una cuchara golpeándolo.

-¡Buenos días manita!.-gritó al lado de mi oído.

-Lárgate Alex, quiero dormir, no he dormido bien anoche.

Y era cierto, esas palabras de Dylan "eres mi mejor amiga" retumbaron en mi cabeza toda la noche, sentí que me apuñalaron, yo realmente lo quería, pero el... Bueno el me vería siempre como su mejor amiga, y nada mas.

-¡YA LEVÁNTATE DE UNA BUENA PUTA VEZ!.- gritó Alex desesperado.

Como vio que simplemente lo ignore soltó el sartén y la cuchara para después tomar mis pies y jalarlos con todas sus fuerzas para sacarme de la cama.

Como lo vi venir me agarre de los barrotes de la cabecera de la cama y no pudo con migo HA por bitch.

-¡Maldita sea Lía ya despierta!

-¡No quiero!

-Agh shit, bueno conozco a alguien que le tiene miedo a las víboras.- hizo cara de bruja malvada (según el) y salió directo a su cuarto para buscar su serpiente de plástico, con la que le hacia bromas a Dylan en las mañanas.

Solo me volvía a tapar y de nuevo estaba a punto de dormirme cuando escuche un grito de niña asustada desde el pasillo, me levante de golpe solo para ver como salía Dylan de su cuarto en ropa interior y corriendo como princesita por toda la casa, entro a mi habitación y cerró la puerta, se vino corriendo hacia mi y me utilizo como escudo.

-¡Víbora!.- dijo asustado detrás de mi.

-Hey, yo no me dicen Lydia Fisher.- conteste burlona.

-Ja Ja, no es broma hay una puta serpiente en mi cuarto ¡es tan grande como mi pene!

-Agh que asco con tigo Dylan.

-¡Es una serpiente asquerosa de esas que le hacen ssssss.... Con su lengua horrible y larga!

-No seas marica Dylan, era Alex.

-Ah si ya sabia.- dijo dejando atrás su posición fetal de hace unos segundos.- es que quería saber si... Este em... ¡MIRA UN UNICORNIO!.

-¿¡DONDE!?.- dije emocionada, cuando voltee Dylan había salido corriendo de mi habitación.

-Marica.- dije para mi misma.

-¡Escuche eso Lía!.- se oyó un grito de Dyl desde el otro lado del pasillo.

Cuando volvía a ver el reloj ya eran las 7:01 a.m ¡en la mierda! Me levante y me metí a la ducha, el agua estaba tan caliente, se sentía como seda recorriendo mi piel... ¡Nah! Mentira, el agua estaba mas helada que el trasero de un pingüino.

Mejores ¿amigos?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora