Y si al final de todo, ¿No hubiera un final feliz?, pues eso es lo que experimenta Issei Hyodou, quien al final de todo es reclutado para unirse a la Task Force 1-4-1
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- Así que ¿La casa segura de Makarov?- dijo Draconis a su compañero.
- Si, el General Shepard mando a el Capitán y MacTavish a Afganistán, al cementerio de aviones, mientras que a mi y a Ghost nos mandara a la casa segura, entre las fronteras de Georgia y Rusia- contesto a su amigo frente a el- creemos que podría estar en uno de esos dos lugares.
- Entiendo.
Naofumi Iwatani, estaba contando la misión que se le había encomendado realizar, habían dos presentes que estaban escuchando atentamente, una mujer rubia voluptuosa de nueve colas conocida como Yasaka, la líder de los Yokai, quien estaba al lado del castaño.
Su hija, Kunou, quien estaba en los hombros del pelinegro, ¿Porque?, por un motivo, ella tiene en su mente que el es el Santo Escudero, por ende le agarro un cariño de estar con el para demostrar que es una niña buena, ademas de que Naofumi no podía decirle que no, sin embargo, al escuchar que Naofumi debería irse, se deprimió un poco.
- ¿El santo se ira?- pregunto la pequeña con la cabeza baja- ¿No puede quedarse un poco más?
- Vamos hija, no seas egoísta- dijo la madre reprendiendo a su hija.
- !No quiero!- dijo aferrándose a la cabeza de Naofumi.
- !Es... pera...!, no pue...do... -Sin embargo, esta acción causo que Naofumi comenzara a ahogarse- ayud... da...
La pequeña Kyubi soltó al pelinegro quien estaba peleando por no caer al suelo, y al sentir que el agarre era menor, entonces tomo una gran bocanada de aire para recuperar su postura.
- L... lo siento Santo, no era mi intención- dijo algo arrepentida la Kyubi.
- Esta bien, no me paso nada, puedes estar tranquila- dijo acariciando la cabeza de Kunou.
Esta era una escena conmovedora para los dos espectadores que había en la sala, tomo a la pequeña y la bajo de sus hombros.
- Espero no molestarte Issei, ¿Puedes?- dijo haciendo una seña a el castaño.
- Comprendo, puedo hacerlo- dijo para acercarse a Naofumi.
Naofumi pidió a Issei que lo transportara de regreso a la base con el fin de alistarse para la misión que estaba por acudir.
- ¿El santo volverá?- pregunto frente a Naofumi.
- Lo haré, puedes apostarlo- dijo Naofurro acariciando la cabeza de la Kyubi.
- !Bien!, !Espero jugar más con usted!- dijo sonriente para ir con su madre.
- Suerte en tu misión Santo, la facción Yokai estará en deuda con usted- dijo la líder.
