—Su Majestad por favor despierte, el emperador tiene algo de que hablar con usted. —su voz hacia eco en mi cabeza, sonaba muy nerviosa.
Espera..
Oh por la put-
¿¡Donde poronga estoy!?
¿¡Y Por que tengo sandías en mi pecho!?
Ok
Primero- no estoy en mi casa, ni mucho menos en mi cuerpo eso ya lo sentí.
Segundo- ontoy'? Lo último que recuerdo fue tomarme la monster que estaba en mi refigerador y dormirme..
Mierda ahora todo tiene sentido, estoy en otro mundo, o probablemente este en mi mente haciendo el ridículo con mi cerebro, que por cierto debe estar arto de mi.
Se siente extraño tener sandías en tus pechos, solo espero que también tenga a atrás, así cuando vaya a correr rebote como el osito gominola.
—Deseaba algo padre? —no se donde me salió la voz pero tenía tono tranquilo.
El hombre frente a mi solo sonrió con tristeza y volteo a ver a otro lado.
«Algo esta mal aquí.»
Y como si mis pensamientos fueran escuchados el que supuestamente era el emperador se levantó de su asiento y me abrazo aún sentada, descorsentada le correspondi con incomodidad.
—Mi bella flor, hija mía me duele tanto esto. —sus ojos estaban cristalizados amenazando con llorar.
—Padre.. —Levante la mirada y solo fueron por cuestión de segundos que logre ver en ellos un aura blanca.
—Mi bella flor, la más hermosa del jardín —me levanto en brazos y me abrazo contra el. — tendrás que perdonar a este viejo hombre y sus irresponsables desiciones. —juraba que el estaba llorando.
—Padre, que sucede. —le mire con preocupación fingida, gracias por las clases jannette.
—Roxanne de Wolwang, princesa heredera de Wolwang y primer hija del emperador de este gran Imperio. —seguía con sus ojos cristalizados y sollozando a la ves que hablaba. —tengo la obligación de comprometerte con el reciente emperador de Obelia. —su aura se volvió deprimente. —Claude de Alger Obelia.
Primer historia con este tipo de temática, espero reciba apoyo.
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|| 𝑹𝒐𝒙𝒂𝒏𝒏𝒆 || 𝘞𝘔𝘔𝘈𝘗
Fantasy«𝘿𝙚𝙘𝙞𝙧 𝙦𝙪𝙚 𝙢𝙚 𝙗𝙧𝙞𝙡𝙡𝙖𝙣 𝙡𝙤𝙨 𝙤𝙟𝙤𝙨 𝙘𝙪𝙖𝙣𝙙𝙤 𝙩𝙚 𝙫𝙚𝙤 𝙨𝙚 𝙦𝙪𝙚𝙙𝙖 𝙘𝙤𝙧𝙩𝙤, 𝙩𝙪́ 𝙝𝙖𝙘𝙚𝙨 𝙦𝙪𝙚 𝙢𝙚 𝙗𝙧𝙞𝙡𝙡𝙚 𝙚𝙡 𝙖𝙡𝙢𝙖.» -𝘗𝘳𝘰𝘮𝘦𝘵𝘰 𝘤𝘶𝘪𝘥𝘢𝘳 𝘥𝘦 𝘈𝘵𝘩𝘢𝘯𝘢𝘴𝘪𝘢, 𝘋𝘪𝘢𝘯𝘢. -𝘓𝘰 𝘴𝘪𝘦𝘯𝘵�...