DECISIÓN

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Shipp: Jesusgetta
Fandom: Minecraft con Noobs.

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Los ruidos de los fuertes azotes en la muralla lo desconcentraban. ¿Será este el final? Se preguntaba.

Le temblaban las manos al intentar hacer más flechas. Vegetta sabía que los chicos luchaban allá fuera, y era difícil hacerlo sin que nadie estuviera disparando desde la muralla. Se encontraba cansado, pero la adrenalina en su sangre podía más.

Habían pasado por esto antes, los saqueadores los atacaban de vez en cuando, pero esta vez era diferente. Quizá se habían vuelto más fuertes desde la última vez, o quizá se resentía la pérdida de uno de sus compañeros.

Pues desde que Jesús se fue, nada había vuelto a ser igual. Mentiría si dijera que no lo extrañaba, le tenía un cariño muy especial, pero por alguna razón siempre lo había tratado de forma algo dura, como si no le importara, cuando en realidad sucedía todo lo contrario. Pero se dio cuenta muy tarde.

El ojimorado sacudió su cabeza, no era momento de pensar si no de luchar.

De pronto el estruendo de las murallas cesó.

—Hola, Vegetta— dijo una voz tras de sí.

Vegetta no lo creía. Esa voz, esa frase. Aquel que había ansiado ver por tanto tiempo... ¡¿sería posible?!

—¡JESÚS!— exclamó, como si el alma le hubiese vuelto al cuerpo, pero también como si lo abandonara un segundo después de dar la vuelta.

Vegetta soltó los materiales que tenía en manos, aquel no era el reencuentro que esperaba en lo absoluto.

—¿Jesús?— Vegetta estaba feliz, pero confundido.

Aquel que estaba ante él, era difícil decir si era el mismo chico que conoció alguna vez. Se veía tan cambiado, aquella ropa gris que, sin duda alguna, pertenecía al bando enemigo, la corona en su cabeza, pero no sólo eso: su cara, sus expresiones ya no eran las mismas, aquellos ojos azules que alguna vez lo miraron tan llenos de vida se encontraban totalmente opacos.

—Hola... Vegetta— repitió Jesús.

—¿D-donde haz estado, chaval? Te buscamos por todos lados— el castaño quería abrazarlo. Lo ansiaba, es decir, ¡por dios! Lo había esta esperando por tanto tiempo, llegó a temer lo peor. Pero él estaba aquí, el problema ahora era saber si seguía siendo él. —Creímos que quiza- — el ojimorado sacudió su cabeza, tratando de disipar ese pensamiento. —P-pero estas aquí.

El mayor trató de acercarse, pero Jesús lo evitó.

—No vine aquí por esto.

El ver el gesto del menor lo desgarró, sabía que quizás podría odiarlo, pero nunca creyó que el hecho de vivirlo le dolería mil veces más.

Recordaba vivamente el día en que pelearon, porque por ese día se odiara el resto de su vida. Porque aquel día había sido el último día en que lo habían visto.

Habían vuelto de atacar la mansión de los saqueadores, durante el ataque Jesús se despegó del plan original, pues el quería probar su valía ante Vegetta, pero no salió tan bien.

Su imprudencia provocó que sus compañeros se lastimaran seriamente y que la misión fracasara de forma abrupta.

De camino a Wakanda nadie le dirigió la palabra, sabía que Vegetta estaba molesto, se notaba en su andar. Cuando los aldeanos los vieron heridos el pánico se apoderó de ellos, Vegetta tuvo que mentir para tranquilizarlos y los héroes se reunieron en su casa.

『ONE-SHOTS』|| Minecraft con Noobs™Donde viven las historias. Descúbrelo ahora