"Con Gratitud"

Disclaimer: Nada me pertenece. Esta es una traducción y adaptación de la historia original "With Gratitude" por Genveon.
Pairing: Yoonseok.
Personajes: Yoongi, Hoseok, Jimin (menciones).
Warnings: M/M, contenido adulto, consentimiento dudoso, comportamiento posesivo, modificación o alteraciones en las personalidades, sumisión.

El original pueden encontrarlo en AO3: With Gratitude por Genveon.

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-Ahora, continúa -ronroneó Min mientras se acomodaba plácidamente en el sofá-. Cada pieza, quítatela. Quiero ver qué tengo aquí.

Se inclinó hacia delante, apoyando los codos contra sus rodillas. Sus felinos ojos reían de regocijo, pero había un peligroso depredador brillando desde aquellas insondables profundidades.

[....]

Era sábado por la noche, terminaban la doceava discusión en el día. Desde el inicio de su matrimonio con Park la vida se había puesto complicada día con día y las malas noticias habían caído como bombas.

Jimin y Hoseok no se veían, no se besaban, no había más cariño entre los recién casados y pensar en intimar era una locura.
Su Jimin siempre estaba cansado, molesto, enfadado con la vida, era un hombre de perfección y estar a punto de caer en bancarrota era una pesadilla.

La empresa que su padre y él mantenían fuerte había caído tan rápido con solo llegar Min Yoongi a sus vidas. Aquel hombre los había puesto en la mira y en menos de tres días se había desatado una guerra peligrosa en la que llevaban las de perder. La codicia del pálido era monstruosa y Jimin no era rival para él, por ello se encontraba por perder la cordura.

Su profundo amor llevó a Hoseok a tomar una decisión drástica. Persiguió a su enemigo Min día y noche, esperó en su edificio a su llegada y exigir por una reunión privada decidido a hacer lo imposible por el amor de su vida.
Cuando estaba por darse por vencido el hombre apareció, le miró profundamente y aceptó. Sus palabras fueron claras y duras.

-Quieres ayuda o piedad, necesitas hacer sacrificios. Nada es gratis en esta vida Sr. Jung.

Hoseok no lo pensó mucho, juró que por amor haría cualquier cosa sin importar el precio.

[....]

-Eres mío, ¿cierto, Hoseok? -dijo como si estuviera bromeando. Había una retorcida sonrisa de satisfacción en su rostro. Aquellos oscuros ojos suyos, posesivos y hambrientos, se deslizaron por cada línea de su cuerpo. En ese momento, era el monstruo dentro de Yoongi quien observaba y ronroneaba con presumida satisfacción sobre su presa derrotada.

El miedo estaba allí, elevándose por su garganta tan repentinamente que tuvo que ahogarlo. Sus dedos no temblaban. Era su sola voluntad la que impedía que demostraran su miedo; pero Yoongi ya era bien consciente de ello. Probablemente incluso le excitaba. Bastardo enfermo.

Trató de fingir que Yoongi no estaba ahí, pero tras quitarse la camisa, supo lo inútil que era esto. Los ojos de Min perforaron su espalda, trazando cada músculo tenso.

El aire frío y el escrutinio de los ojos del otro hombre hacían temblar todo su cuerpo. Sus pezones se rizaron en el aire frío y apretó los dientes, forzándose a continuar incluso mientras Yoongi dejaba escapar un silbido apreciativo.

-Muy interesante -dijo por detrás de él-. Muy, muy interesante. Sigue así... Vamos a ver qué otra cosa esconde mi chico bajo esas ropas.

Sus zapatos fueron descartados. Sus dedos hurgaron la hebilla del cinturón aunque fue removido fácilmente, el cuero susurró contra la tela antes de dejarlo caer al suelo.