trece, entre más me la mamas más me crece

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el azabache abrió lentamente sus ojos, recién estaba despertando de una siesta de unas once horas

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el azabache abrió lentamente sus ojos, recién estaba despertando de una siesta de unas once horas.

fuertes bostezos salían de su boca

a medida de que sus ojos se abrían mejor se adaptaban a la luminosa luz de sol, la cual se colaba por las persianas de la fría habitación

Inspeccionando el lugar, pudo notar que algo faltaba en su cama, alguien, Rodrigo, no había rastro de él en la habitación

Iván sin prisa se acercó a la mesita de noche en busca de alguna nota o carta, la cual justifique la razón por la que su chico no estaba con él

En la mesita de noche no había nada

Agarro su celular, el cual se encontraba reposando en aquel taburete

No tenía ningún mensaje de Rodri, para ser exactos ni siquiera encontraba su contacto

Eso fue raro

Paso minutos buscándolo, estresandose por no encontrarlo decidió salir de la cama e ir a buscarlo por el departamento

Delicadamente se levantó de aquel cómodo colchón. Se dirigió hacia la primera planta

Mientras bajaba las escaleras podía notar que tampoco se encontraba en el departamento

Reviso todo el departamento sin resultado de Rodrigo

¿Que estaba pasando?

Agarro nuevamente su celular, el cual se encontraba en el bolsillo del suave pijama

Se dirigió hacia twitter, específicamente a la cuenta del castaño

No la encontró.

¿Puede una persona desparecer de un día para el otro?

Claro, si muere

Confundido, Iván entro a su galería, el recordó que tenía fotos de él con Rodri. Inmediatamente las busco

No las encontró

Asustado, contacto a sus amigos preguntándoles si sabían que había pasado con aquel ojiverde

Ellos no sabían de quien hablaba Iván

¿Qué había pasado con Rodrigo?

Iván se arregló y pidió un Uber

Fue en dirección al departamento de Rodrigo

Al llegar, se dirigió al piso en el que solía vivir el ojiverde

Desconcertado, tocó la puerta suavemente dos veces

Salió una pelirroja, alterado, Iván preguntó si se encontraba Rodrigo Carrera

La mujer negó, dijo que posiblemente se había equivocado

Iván insistió diciendo que allí solía vivir un chico joven

Ella confundida negó, dijo que ella llevaba viviendo allí unos cuatro años

El pelinegro se disculpó y se alejo lentamente, en el transcurso se pregunto a si mismo si se había confundido de piso, fijándose en el número al lado del elevador, el número era correcto

¿Qué sucede? ¿En qué momento la tierra se trago a Rodri?

Consternado, él abandono aquel edificio dirigiéndose hacia un parque

Estaban empezando a caer ligeras gotas de agua

El cielo estaba llorando

El azabache se metió las manos en los bolsillos de su buzo, cabizbajo, solamente caminaba en dirección recta

Subió un poco la mirada, el entorno estaba frío y repleto de soledad, la neblina abarcaba toda la ciudad

Entre los gases blancos pudo divisidar al bonito castaño ojiverde

Corriendo alegremente, se acercó hasta el con los brazos extendidos y una sonrisa resplandeciente

Al entrar en contacto con el bajito él se desvaneció en el aire

El se esfumó, al igual que su sonrisa

Lágrimas salían de sus perlas marrones

Eso había sido una alucinación

Cabizbajo, volvió a caminar por el parque

Sintió una respiración en su cuello, instantáneamente Iván volteo, era Rodri, el tenía una sonrisa de oreja a oreja, su sonrisa era lo único que resaltaba entre lo demás

El castaño se acercaba lentamente hacia el azabache, mientras él solo se quedaba quieto, no se podía mover aunque lo siquiera

Rodrigo le dio un beso en la mejilla-

Y ahí fue cuando Iván despertó.

Rodrigo estaba sentando en la cama con su celular. Cuando se dio cuenta de que el alto había despertado, sonrió ampliamente y le dio un tierno beso en sus labios resecos

-¿Dormiste bien, lindo?

-Bien para el orto, tuve una pesadilla. Soñé que te perdia, la peor

Rodri solo río ligeramente y se apego al pecho de Iván como si su vida dependiera de ello

Rodri solo río ligeramente y se apego al pecho de Iván como si su vida dependiera de ello

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[Kiwt] ||  Spreen x CarreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora