Perderme a tu Lado | Steve Rogers

*Ese clic en nuestras miradas*

Lara..

El cojunto de diseñador sobre mi cuerpo muy bien hidratado solo esclusivo para mi satisfacia aun mas mi ego.

— Justo iba por ti. — me dice al encontrarme en el pasillo.

— ¿Estas listo? hemos pasado mucho tiempo sin ir a la empresa, ya debemos ser responsables — formo comillas con ciertas muecas.

— No es algo que me agrade.. — apoya de igual manera — pero si ya estoy listo.

— Bien — golpeo ligeramente su pecho — voy por algo a la cocina y nos vamos.

Paso por su lado abriendome paso hasta la cocina donde encuentro a la mayoria.

— No crees..

— No — niego e intersedo antes de que papá comenzara con sus celos — Buen día..

Respondieron al saludo lo que abre carta libre hacia Steve por su pequeña distracción logrando robarle uno de sus panqueques recibiendo una mirada con el ceño frunsido y una amena sonrisa de mi parte.

— Hoy ira el muchacho a tu empresa — avisa con cierto recelo papá — por favor trátalo bien.

— Lo tratare muy bien... — estiendo con gran ampliación la palabra — te lo aseguro.

— No tenia que escuchar eso — alce mis hombros para beber del café de Steve.

— Hey..

— Gracias rubio. — dejo un beso en su mejilla como en el de papá —vamos Lee. 

— Adiós.— se despide recibiendo respuesta.

Salimos del complejo para subir a mi auto, no tardamos mucho cuando ya estabamos adentrandonos a mi empresa entre saludos de los empleados.

Llegue a mi oficina y Lee fue a la suya, estuve todas esas horas arreglando papeles, archivos, todo lo que sea necesario para que les llegue los fondos necesarios a los niños de bajo recurso, instituciones, vi mis cuentas de mi cadena de pastelerías cuando tocaron mi puerta.

— Adelante.

— Renacuajo — alzo la mirada — el chico que mando Tony acaba de llegar.

— Que pase por favor.

Asintiente para cerrar la puerta, unos cuantos segundos y aquella puerta se voovio a abrir dejando a su esplendor a un atrativo chico.

Tal vez tenia mi edad o era un poco mayor, su cabellera obscura bien perfilada, sus labios en una ampliación seductora y sus ojos, ellos marcaban un fuerte territorio.

— Parker.. — me pongo de pie.

— Hola.. — me acerque para estrechar nuestras manos provocando cierto escalofrio, uno muy agradable.

— Mi padre dijo que vendrías — retrocedo para regresar a mi asiento — por favor — formo un ademán pidiendole que se siente lo cual hace sin reprochar con un;

— Gracias..

— ¿Dime que es lo que te hace querer la beca Septiembre? — tomo asiento.

— El rendimiento academico.. — busca la palabra en su mirada — no solo que es uno de los mejores sistemas que puede tener este pais — noto la ligera con la que limpia sus manos en su ropa sacandome una sonrisa interna.

— Tranquilo — pido con una sonrisa — no tienes porque ponerte nervioso, no soy mi padre.

— Lo siento.. — baja la mirada un poco ruborizado — es la primera vez que hablo con una chica tan bonita sin que quieran burlarse.